Quién es Juan Carlos Cueto, el 'cerebro' del caso Koldo que ya se jugaba 50 años de cárcel por sus negocios en Angola
El señalado como principal corruptor de la trama tiene pendiente una causa en la Audiencia Nacional por la venta de material policial en el extranjero
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Iniciar sesiónA Juan Carlos Cueto le pilló en el extranjero la investigación de la UCO de la Guardia Civil que ha reventado en lo que se conoce extraoficialmente como 'caso Koldo' y oficialmente como 'Operación Delorme'. De haber estado en España, habría sido ... uno de los detenidos, aunque eso no le ha librado para comparecer en la Audiencia Nacional... otra vez.
Y es que este empresario, además de ser considerado el 'cerebro' de la trama de las mascarillas y tener una estrecha relación con Víctor de Aldama, otro de los acusados, ya se enfrentaba a una posible condena de 50 años de cárcel de la Fiscalía Anticorrupción por los negocios de su grupo empresarial, Cueto, en Angola.
Según la investigación, allí donde habría conseguido comisionar comisionar 93 millones de euros gracias a los sobornos a funcionarios y otras prácticas ilícitas para colocar material policial. De esos 93, 70 millones acabaron en cuentas poco claras con la intervención incluida de Beatriz Paesa, sobrina de Francisco Paesa, histórico espía español de los años 80 y 90 cuya historia fue llevada a la pantalla en 'El hombre de las mil caras'.
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Los negocios de Cueto con Aldama, antes y después de Koldo
Juan Carlos Cueto era el titular efectivo de Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas (aunque oficialmente era Iñigo Rotaeche), la empresa que facturó más de 50 millones de euros en contratos públicos de mascarillas por intermediación, presuntamente, de Koldo García. La Guardia Civil le escuchó pedir al exasesor de José Luis Ábalos que usara su «influencia» para que la reclamación del Gobierno balear (por entonces bajo el mando de Francina Armengol, hoy presidenta del Congreso), al que habían vendido 3,7 millones de euros en mascarillas que resultaron ser defectuosos, quedase en nada.
Según la investigación, Cueto es quien introduce a Víctor de Aldama en el círculo de Koldo, con quien la Fiscalía considera que tiene una buena relación. Es más: consideran que había «una relación directa y estrecha» entre el exasesor de Ábalos y Cueto, «que no se circunscribe únicamente a la adjudicación de los contratos».
Beneficio de José Luis Cueto y Víctor de Aldama en la venta de mascarillas
Paralelamente, Cueto y el presidente del Zamora viene ya de lejos, entremezclada en varias ocasiones y en diversos negocios. Colaboradores habituales, la citada sociedad Soluciones de Gestión «habría sido empleada como una empresa instrumental en un proyecto común» entre Cueto y Aldama, «quienes a pesar de no figurar documentalmente habrían sido los responsables» de la misma. Tanto Aldama como Cueto lograron pingües beneficios: el primero obtuvo 5,5 millones de euros y Cueto, «titular de hecho» de la sociedad, 9,6 millones.
No obstante, de acuerdo a la documentación del caso a la que ha accedido ABC, ambos han compartido sociedades y negocios antes y después de esos contratos bajo sospecha, y que, por intermediación de Koldo García, «que habría cobrado por ello», fueron adjudicados desde Puertos del Estado, ADIF y el Ministerio del Interior.
Un ejemplo de una colaboración posterior entre Cueto y Aldama es Telefarmacia App, un sistema de medicamentos a domicilio que fue declarado ilegal.
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María AlbertAl margen de sus negocios y su labor como negociador en el rescate de Air Europa, el que fuera CEO de Globalia ocupó muchas portadas por su llamativa vida social y sus famosas fiestas
Cueto aseguró en sede judicial que él no tenía intención de enriquecerse y que sólo quería ayudar. Según él, su conocimiento sobre las importaciones fue clave para obtener mascarillas rápidamente y en precio de mercado. Que por el camino obtuviese un tangible beneficio económico es lo que ahora tendrán que mirar los investigadores.
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