Ola de incendios
La Xunta sospecha que el fuego de Verín fue provocado por un conductor incendiario
Este fuego, provocado, ha arrasado 600 hectáreas cercanas a núcleos de población, aunque ahora se encuentren fuera de peligro
Ántar Vidal
SANTIAGO
El fuego que arrasa Verín (Orense), y que se ha cobrado ya 600 hectáreas -según el último parte de Medio Rural-, fue concienzudamente provocado. Por suerte, y tras toda una noche de ardua lucha contra las llamas, la evolución del foco de Verín ... es «favorable». Sobre las 15.40 de este miércoles comenzaban las primeras llamas en el municipio, a pocos metros de las casas. La intención, señaló el conselleiro de Medio Rural, José González, era hacer que todos los efectivos antiincendios acudieran a la zona para apagar el fuego próximo a las casas y proteger a las personas, «como siempre hacemos».
En ese momento, con gran parte de los efectivos concentrados en los primeros focos, el coche del pirómano se desplazó a zonas forestales para seguir su plan: a medida que avanzaba iba encendiendo nuevos focos, cerca de la carretera, hasta llegar a la docena de ellos. La del miércoles fue una «tarde de muchísima dificultad por culpa de los incendiarios«. Las carreteras A-52 y la N-525 tuvieron que ser cortadas, aunque se restablecería el tráfico sobre las 21.00 horas. También ha provocado desalojos y confinamientos de algunos vecinos durante la noche, aunque todos han podido regresar a dormir a sus casas.
A partir de ahí, todo se fue fuera de control. El incendio de Verín, que había comenzado siendo un pequeño foco de 2 hectáreas al mediodía, rápidamente se convirtió en el incendio activo de Galicia más grande. Apenas había caído la noche del miércoles cuando ya había superado las 500 hectáreas, a pesar de estar «todos los medios terrestres y aéreos», incluso efectivos portugueses, luchando por su extinción. Con todo, por lo de pronto no hay que lamentar grandes daños materiales. Sí se ha visto afectado el recinto de una fábrica de la localidad, pero las viviendas ya se encuentran fuera de peligro, aunque sigue activa la Situación 2 de manera preventiva.
Ola de incendios provocados
El pasado mes, la Comunidad vivió dos semanas de extenuante lucha contra los incendios. Tras una tormenta, los rayos iniciaron medio centenar de fuegos que terminaron saldándose con más de 32.000 hectáreas. Sin embargo, esta ola de incendios actual poco tiene que ver con aquella: en los nuevos focos se está repitiendo un patrón. Son fuegos que comienzan en varios puntos al mismo tiempo, normalmente cerca de la carretera, lo que indica su clara intencionalidad.
Por el momento, con las mismas características, está activo uno en Maceda (Orense). También está «evolucionando favorablemente», pero ha arrasado ya 150 hectáreas. Es «un incendio intencionado de libro», declaró este miércoles el alcalde de la localidad, Rubén Quintas, a Ep, pues había comenzado con tres focos simultáneos.
Durante las últimas semanas han sido varios los incendios que resultaron ser provocados. El de Saviñao de la semana pasada había tenido también tres focos simultáneos que habían comenzado al lado de la carretera. También sucedió lo mismo en Castrelo de Miño, que terminó cobrándose 200 hectáreas.
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