Rueda enfría la posibilidad de un adelanto electoral en Galicia

Galicia y el País Vasco acostumbran últimamente a ponerse de acuerdo para celebrar los comicios autonómicos en la misma fecha en las dos regiones. Y de diferentes maneras y en distintos escenarios, pero este miércoles, tanto el lehendakari vasco, Íñigo Urkullu, como el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, han sugerido que no tenían ninguna prisa para un adelanto electoral. Urkullu emplazó a los suyos a seguir trabajando «hasta culminar el mandato», mientras que Rueda anunció que iban «a seguir gobernando y atendiendo a lo importante».

El presidente de la Xunta y líder del PPdeG hizo esas declaraciones desde un hotel de Santiago donde se reunía la junta directiva de los populares gallegos. En la Comunidad, insistió el mandatario autonómico, los populares seguirán «gobernando» de acuerdo con «el mandato ciudadano».

Más allá de alejar la posibilidad de un adelanto electoral, la junta directiva del PPDeG sirvió a los populares para perfilar dos conclusiones de la cita con las urnas del pasado domingo. Por una parte, el «apoyo sin fisuras» al líder del PP y expresidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y, por otra, saborear y reivindicar el «abrumador» resultado de los populares el 23J en lo que a Galicia se refiere.

Sobre lo primero, Rueda considera que Feijóo, después de una victoria electoral insuficiente para gobernar ni en minoría ni con solo el apoyo de Vox, debería ser investido presidente para evitar que el futuro ejecutivo esté «condicionado por extremos». «Yo reivindico su derecho a ejercer y hacer lo que tiene que hacer un ganador de las elecciones. Reivindico el derecho de Feijóo a formar gobierno«, insistió Rueda en su intervención ante la junta directiva del PPdeG.

Pero pase lo que pase finalmente en el Congreso, donde Feijóo lo tiene muy difícil para reunir los apoyos necesarios para gobernar, y donde Sánchez solo podría conseguirlo con el visto bueno de las fuerzas independentistas, incluida la del prófugo Carles Puigdemont, en la Comunidad gallega, según afirmaciones de Rueda recogidas por Ep, se preservará la «estabilidad» y se seguirá «gobernando».

El presidente de la Xunta aprovechó la ocasión para repetir los resultados electorales ya conocidos: que el PPdeG ha subido de diez a 13 diputados en relación a las últimas generales de 2019, que logra el máximo número de senadores posibles en cada circunscripción, y que ha subido 11,6 puntos en porcentaje de apoyo hasta superar el 43,5 %. «El análisis más certero es que los gallegos que confían en el PP acudieron masivamente a votar», concluyó el mandatario gallego.

En definitiva, los populares gallegos no tienen ahora ninguna prisa por citar a los ciudadanos a las urnas. Exactamente lo contrario que los partidos de la oposición en el Parlamento autonómico, PSdeG y BNG. Este miércoles, los socialistas han apremiado al presidente de la Xunta a convocar las elecciones gallegas, pese a que en el PSdeG no está claro quien sería el candidato que presentarían a esos futuros comicios.

El secretario provincial del PSOE de Lugo, José Tomé, ha instado al PPDeG a dejar de «contar cuentos» y «convocar elecciones» para que «hable el pueblo gallego». El dirigente socialista se pronunció así ayer al ser preguntado por un posible adelanto electoral en Galicia, una opción que él mismo ve complicada.

«Eso lo tendrá que saber el señor Rueda, pero yo creo que no lo va a haber porque no se va a atrever», afirmó Tomé, que valoró, según recogió Europa Press, que los resultados del PP en Galicia «fueron malos». «Queda muy justa la mayoría que ahora mismo tiene el PP si ahora se repitiesen estos resultados en unas autonómicas», añadió. El socialista cree que el gobierno de la Xunta para el PPdeG «está claramente en riesgo» y subrayó que «hay una alternativa que está llamando a la puerta».