Rueda acusa a Sánchez de no estar «a favor de Galicia» y privilegiar a otras comunidades

 Rueda, que ha precedido en el uso de la palabra al presidente nacional del partido, Alberto Núñez Feijóo, ha señalado que es consciente de que «no vamos a tener ayuda» desde el Gobierno para afrontar el futuro. Un futuro que ha vuelto a advertir de que será complejo, aunque ha querido también trasladar un cierto «optimismo», por el trabajo hecho desde la Xunta, con «sentidiño» y con Feijóo al frente, en la última docena de años. Una labor que permite manejar «cifras», como el crecimiento del PIB -un 1% en la última comparación trimestral-, la creación de 25.000 puestos de trabajo indefinidos, el nuevo récord histórico de exportaciones o el año turístico inédito en llegada de visitantes, con «un tirón de economía también fundamental».

Rueda ha censurado que «día a día» el Gobierno demuestra que, en lugar de la «objetividad», apuesta por los «favoritismos» hacia autonomías que no son ni Galicia ni las representadas por los barones presentes en el acto, Andalucía, Madrid, Castilla y León y Murcia. Tras volver a reivindicar que la gallega tiene una sanidad pública «magnífica» -previamente ha vuelto a romper una lanza por el dispositivo de prevención y extinción de incendios, «el mejor de España»-, frente a las críticas, en ambos casos de la oposición -sobre la atención primaria, ha defendido que «necesita mejorar» pero, a pesar de las vicisitudes del verano, «llega (...) a la inmensa mayoría de los gallegos, a la práctica totalidad»-, ha vuelto a criticar la «falta de implicación del Gobierno central», al que ha acusado de actuar con «su irresponsabilidad, dejadez y actitud incomprensible», sin atender las demandas de Galicia y otras autonomías para disponer de más profesionales -señaladamente, con nuevas plazas de MIR-.

Del mismo modo, ha vuelto a reclamar un «reparto justo de los fondos europeos», afeando que la planta de Stellantis en Vigo quede fuera del Perte del automóvil; y ha lamentado que la «ilusión» que despertaban los proyectos «potentes» presentados por la Comunidad «se va a acabar perdiendo por culpa del Gobierno central» y su «falta de objetividad». «¡No lo vamos a permitir!», ha proclamado.

«Seguiremos reclamando con fuerza», ha asegurado. En su lista de reproches a Sánchez, no ha faltado la demora en la llegada de los trenes Avril, necesarios para que el AVE llegue a toda Galicia, prometidos para el mes de julio y aún sin fecha. Rueda se ha mostrado convencido de que no ocurriría lo mismo, esta tomadura de pelo, en comunidades privilegiadas por el Gobierno, «que sí que considera Pedro Sánchez importantes para sus objetivos de mantenerse en La Moncloa».

A partir de ahí, sin esa «ayuda» del Gobierno central, Rueda ha prometido que la Xunta aprobará unos presupuestos, para 2023, «responsables», que se valdrán de un techo de gasto récord, pero «no tirando de deuda porque sí». Priorizando el auxilio a los más necesitados, «actualizando» las ayudas sociales para que los más vulnerables tengan «el mismo nivel de ayudas que el año pasado». En paralelo, el curso escolar arrancará con las guarderías totalmente gratuitas.

En esta línea, ha vuelto a reivindicar que se mantendrán las tasas universitarias menos onerosas, con nuevas bajadas de impuestos a las rentas más bajas, manteniendo y consolidando las rebajas fiscales en vigor, y apoyando a empresarios y autónomos, que «vuelven a ser amenazados y vilipendiados» por «la ministra de Trabajo».

En el tramo más político del discurso, Rueda ha reivindicado la «pluralidad» y diversidad de España, que al mismo tiempo «tiene en la unidad una de sus principales bazas». Por eso, ha razonado, «necesitamos un Gobierno responsable y un líder para que nos una a todos nosotros». Que entienda que las regiones «tenemos cada una nuestras legítimas aspiraciones y podemos competir (...), pero que lo discutimos, lo hablamos, nos entendemos, no nos enfrentamos unos con otros, y creemos que España es fuerte cuando está unida y trabaja con gobiernos responsables». «Y con un líder que tienes que ser tú y tiene que ser cuanto antes», ha dicho a Feijóo.

«Tienes una tarea enorme por delante», ha incidido en alusión a su jefe de filas. «Supiste demostrar muchísima generosidad, muchísima valentía. Lo mínimo que mereces, por supuesto todo el PP de España, pero el PP de Galicia, que va a seguir siendo tu partido, este más que ninguno... por tanto, cuenta con todos nosotros», ha proseguido. «Esperamos muchas alegrías de tu parte. Sabemos que es posible si quieres y si tienes apoyos, como sabemos que queremos, cuenta con nuestro apoyo».

Rueda se ha mostrado «seguro» de que dentro de un año, en «primera línea» del acto de arranque del curso político de 2023, habrá «muchísimos más presidentes autonómicos». En clave gallega, ha agradecido a los suyos la celeridad para designar candidatos a alcaldes en las siete ciudades; y del mismo modo, se ha mostrado convencido de que, en un año, «el poder urbano del PP en las ciudades y no solo en las ciudades se va a ver» en Cerdedo-Cotobade.

«Qué rápido pasa un año, qué de cosas pasaron en este último año, ¿verdad?», decía en el arranque. Una «transición para seguir ganando e ir a por la quinta mayoría», ha sintetizado una sucesión de acontecimientos imprevistos. «La vida avanza y los cambios se suceden, que me lo digan a mí y que os lo digan a vosotros», ha retomado la idea en el cierre. Y un mensaje: «cuando nos ponen a prueba», toca demostrar que «estamos a la altura».

Aunque no ha tomado la palabra durante el acto -además de Feijóo y Rueda, han hablado el alcalde y anfitrión Jorge Cubela, a punto de ser padre, y la secretaria general del PPdeG, Paula Prado-, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla, no ha querido dejar pasar la oportunidad de enviar un mensaje a Sánchez en declaraciones posteriores; ante los medios de comunicación, Moreno Bonilla ha demandado al Gobierno «menos insultos y más propuestas».

«Menos insultos al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, y más propuestas para resolver los muchos problemas que tienen los españoles», ha incidido, deteniéndose en el caso concreto de la sequía. «Pedimos una vez más sentido común al Gobierno, diálogo y moderación en sus planteamientos», ha abundado. El modus operandi con el decreto de ahorro energético es solo el último ejemplo, ha lamentado, de una actitud, de Sánchez y su gabinete, que le ha llevado a pedir que «determinadas cosas se hagan contando con las comunidades autónomas». «No entendemos esa posición permanente y constante de soberbia e imposición», que genera «malestar» y «disfunción» en la «arquitectura institucional», que venía funcionando «desde la cooperación y el diálogo», ha cerrado.