Una rebelión interna le estalla a Vox en Galicia a las puertas de la campaña del 18F

A este diario ya le constaba que Díaz-Mella, cuyo bagaje el 28M en Vigo y el 23J en Pontevedra no pasó de mediocre, no concitaba precisamente el respaldo de todas las bases de Vox en su territorio. Y que no eran pocos los que ya advertían de que no le votarían, en lo que se cocinaba como una rebelión interna que le ha ido a explotar a los de Bambú a las puertas de la campaña, que arranca el próximo 2 de febrero, y a menos de un más ya de que se abran las urnas.

Ese grupo de críticos, que se marcharon del acto, dejando con la palabra en la boca a Díaz-Mella, el domingo, consiguieron después hacer llegar al propio Abascal un escrito en el que decían no entender «absolutamente nada» del criterio seguido para su designación.

Le acusan de llevar cuatro años «arruinando el partido en Pontevedra como presidente de la gestora provincial»; «viniendo precedido de una serie de traiciones, de incompetencias y de deslealtades». Con sospechas incluso sobre su gestión económica, se quejan de que, lejos de haber sido «destituido» como «han pedido reiteradamente las bases», se le ha premiado como rostro visible de Vox para el 18F.

«Es muy difícil seguir ayudando al partido con estas decisiones», lamentan en el escrito, al que tuvo acceso EP. Tanto es así, que advierten de que si no se aparta a Díaz-Mella de la gestora, tras el «estrepitoso fracaso» electoral que vaticinan el 18F, con «todo el dolor» de sus corazones, pedirán su baja como afiliados.

«Los que defendemos al partido y a usted como líder, Don Santiago Abascal, los que amamos a España, los que queremos servirla y no servirnos de ella, los que conocemos la trayectoria del partido en Vigo, en Pontevedra y en Galicia, no entendemos absolutamente nada», sentencian.