El PP ve en Sumar un «ejercicio de hipocresía sin precedentes» de Yolanda Díaz, alentado por Sánchez

El dirigente popular, que lleva varios días con agenda en la Comunidad, aprovechando el relativo parón de la Semana Santa, insistió en que el último movimiento de Díaz no aporta «nada nuevo». «Los gallegos conocemos bien la trayectoria política» de la vicepresidenta, insistió; «cada cuatro años cambia el nombre» a su «proyecto» para «no asumir las consecuencias» de la «gestión» de su etapa previa: de IU a AGE, de AGE a las Mareas —«al final tuvo que cambiarse de circunscripción para conseguir su propio escaño, la diputada ferrolana se convirtió en diputada pontevedresa»—, y a lo que era Podemos «pretenden llamarle Sumar», «que en realidad debería llamarse dividir».

Todo, abundó, con la connivencia de Sánchez, que «se dedica a patrocinar las ambiciones personales» de Díaz, sin «más sentido que alimentar los egos» de quienes forman un Gobierno que ha mutado de bipartito a una «especie de tripartito», con el Ejecutivo «más dividido que nunca».

Tellado, ante la prensa, insistió en que el Gobierno se encuentra en un «estado de descomposición absoluta», «se desintegra», algo que se podría haber evitado, dijo, si Sánchez hubiera convocado las elecciones generales al mismo tiempo que las municipales y autonómicas del 28-M. Al menos, habría permitido «ahorrarle al país estos seis meses de agonía» que vaticina Tellado que cubrirán el tramo hasta que Sánchez llame a las urnas. Medio año de «manual de resistencia», donde el presidente de un Gobierno donde «no hay nadie al frente del timón» solo aspira a parapetarse y aguantar; «seis meses en blanco» en los que «no se atenderán los problemas estructurales» de España, vaticinó Tellado.

Sánchez, comentó, está «muy preocupado» porque «su Gobierno ha fracasado a lo largo de los últimos años, especialmente a lo largo de los últimos meses», con fiascos como el de la ley del 'sólo sí es sí'. De ahí que le interese dar alas a Sumar, en tanto le permite «hablar de algo que no sea la gestión» de su gabinete, dividido y «mucho más preocupado en su ombligo» que por los españoles.

Gana tiempo hasta que lleguen las generales, pues, acusó Tellado, pretende «gobernar incluso perdiendo», un modelo fruto de la «desesperación» y la «agonía». El PP, contrapuso, «sólo» quiere «gobernar ganando». Pondrá la primera piedra el 28-M y rematará en las generales, pronosticó.