El PP denuncia «una estrategia de desprestigio» de la sanidad desde la oposición

Tomó la palabra en la Cámara la diputada María Encarnación Amigo Díaz, que condenó «discurso apocalíptico del BNG sobre la situación de la sanidad gallega», un ámbito más, dijo, en el que son «el partido del no» -una crítica que los populares emplean mucho últimamente con los nacionalistas, que rechazan la implantación de industrias como Altri, explotaciones mineras o parques eólicos y, ahora también, reconocer los avances que se han conseguido en materia sanitaria en las últimas décadas-. «Son incapaces de asumir que hoy en día la sanidad en Galicia cuenta con el mayor presupuesto de la historia, que se traduce en mejores servicios, mejores hospitales, nuevos centros de salud... Son incapaces de aceptar cuando un usuario hace valoraciones positivas del Sergas en las diferentes encuestas», condenó, un aspecto en el que Galicia «está por encima de otras comunidades. Pero admitir esto sería echar por tierra su catastrofismo».

Los datos, indicó, son ahora mucho mejores que los del bipartito. Pero, en todo caso, «la gran mentira de la izquierda es olvidar que Galicia es referente de la sanidad pública, universal y de calidad», aseveró, sin «negar que hay problemas, claro», pero con una «mejor situación» que en otros territorios, incluso en los que gobiernan los socialistas y los nacionalistas. «Ustedes pretenden ganar en la calle lo que perdieron en las urnas, buscan esconder sus bulos entre gritos y pancartas, pero no lo van a conseguir», advirtió contundentemente a la oposición, a la que acusó de estar instalada en «una estrategia deliberada de desprestigio de la sanidad gallega».

Al hilo, en un intento de «confrontar» lo que consideró falso, destacó que se incrementase la actividad asistencial en todas las áreas, cirugías, consultas y pruebas diagnósticas, al tiempo que se redujeron las listas de espera. «Hasta tal punto que hoy, por primera vez en nuestra comunidad, superamos las 200.000 operaciones en un solo año, un 5,6% más que en el anterior y unas 30.000 operaciones más que en 2008. Esta actividad permitió mantener a la sanidad gallega entre las que tienen los mejores tiempos de espera de todo el país», aseguró. De este modo, expuso que en 2024, el tiempo medio para operarse en Galicia era de 67,1 días, y, aunque «hay que mejorar» y «reducirlo», Galicia es «la tercera comunidad con mejores tiempo de espera quirúrgica, mientras que en 2008 -en el gobierno del bipartito- era la cuarta, pero por la cola». Además, continuó, solo el 3,9% de los pacientes tiene que esperar más de 180 días para operarse en Galicia, frente al 24,3% de la media estatal. «No hay ni un solo dato que no deje en evidencia las mentiras de la izquierda», zanjó al respecto, convencida de que usan esta cuestión como "arma política". Mientras, condenó, "socialistas y nacionalistas son incapaces de reclamar al Gobierno de Sánchez más médicos".

Así lo expuso en el debate de la moción presentada por el grupo nacionalista, rechazada por los populares, en la que se pedía «hacer pública la totalidad de las listas de espera del sistema público de salud, incluyendo las no estructurales, en un plazo no inferior a un mes» y habilitar «los mecanismos precisos» para acabar con este formato de espera. En su intervención, la diputada del Bloque, Iria Carreira, condenó el «oscurantismo» de la Xunta, que, según dijo, se «niega a revelar los datos de las listas de espera no estructurales»: «No quieren que un titular les estropee la foto de su inmaculada gestión, mientras que, por detrás, solo ganan las empresas y la sanidad privada». También la socialista Elena Espinosa arremetió contra la gestión de la sanidad gallega, que está «teñida de negro» y en la que solo «resplandece el trabajo de los profesionales». Las demoras en la atención, lamentó, son «inasumibles» y llevan al sistema a una situación «insostenible», dijo, siendo ese el primer motivo de insatisfacción entre los usuarios.