Polémica en un restaurante de la Costa da Morte en el que los menores de 12 años deben estar sentados toda la comida

Es lo que ha ocurrido con un restaurante gallego ubicado en la concurrida Costa da Morte, en Galicia. El establecimiento, el conocido O Fragón, se encuentra en Finisterra, está reconocido por las guías Michelín y Repsol y cuenta con unas reglas para las mesas con niños que recientemente despertaron una gran indignación a un padre, que no dudó en mostrar en redes sociales una controvertida norma.

El local, en efecto, se dedica a la gastronomía local y cuenta con unas bonitas vistas y terraza cerca del mar. Su página web permite realizar reservas, eso sí con un listado previo de doce condiciones que el restaurante pide consultar previamente a todo interesado.

«Los niños menores de 12 años tienen que permanecer en la mesa acompañados de sus padres en todo momento, si no es así, deberías replantearte la reserva», dice literalmente a tercera condición del listado, que enfadó al padre. Este requisito incorpora, como algún otro, el uso de negritas para poner más énfasis en la edad y la necesidad de que los padres no pierdan de vista a sus hijos.

El local pide, en un sentido similar, que «si vas a venir con niños (-12 años) y/o carritos, consúltanos» e indica un teléfono. Además, añade que si se pasa 15 minutos la hora de la reserva y no han llegado los comensales se ofrecerá la mesa a otro cliente. Otra condición avisa de que «la reserva es solo de mesa, no de ubicación, que será gestionada por nuestro equipo» y de que no se admiten mascotas ni en el exterior ni en el interior del local.

El hombre explicó en Twitter que tiene dos hijos y que al ir a hacer la reserva se encontró con las condiciones sobre niños. «Díganme, ¿disuasivo, intimidante o discriminatorio?», se preguntó y un tanto indignado. Su tuit ha tenido ya más de 13.700 visualizaciones y ha cosechado decenas de respuestas.

Entre ellas hay quienes descartan directamente acudir al restaurante al haber conocido sus especificaciones, mientras que algunos consideran que el aviso es «adultocéntrico» o «edadismo salvaje»y otros se preguntan si los mayores de 12 años sí pueden jugar por el local. «Yo siempre voy a todos sitios con mis hijos. Si se ponen ingobernables me marcho a casa, por responsabilidad», añade otra madre.

Otros aceptan más las normativas. «En los cines y teatros tampoco se permite que los niños corran de un lado a otro y nadie les tira de los pelos», comenta un usuario, mientras que otro recuerda que «hay niños cuyos padres nos dejan jugar como si fuera 'Humor amarillo' por todos lados... No me parece mal el cartel».

«Estoy totalmente de acuerdo con el hostelero: si los niños no están bien educados, no los lleves a comer fuera de casa. Los demás no tenemos por que aguantar a niños correteando y gritando entre las mesas. Si no sabes mantenerlos tranquilos, pides la comida para llevar y te marcha«, dice otra opinión que, con otras palabras, se repite en muchas ocasiones.

Desde el restaurante defienden que especifican las condiciones por el bien de los clientes. Según 'El Español', sus propietarios cuentan que algún menor jugando se ha hecho daño con alguno de los cristales del comedor y que también vivieron el caso de algún niño que se perdió por los exteriores del local, muy próximo a un monte. «Nos gusta advertirlo todo para que no haya malos entendidos«, avisan.

Además, puntualizan que el aviso sobre los carritos lo hacen para poder garantizar que la sala siga siendo espaciosa y que su suelo es de madera, por lo que solicitan que los niños «estén con sus padres en la mesa» para así evitar los golpes continuos al correr sobre la madera. «Muchas personas nos llaman al ver estas advertencias en la web y les informamos de todo», afirman.