La conselleira Ángeles Vázquez, sobre el escrache a su domicilio: «No me va a amedrentar ningún grupo político»
Tres de los participantes en la protesta a escasos metros del domicilio familiar de la política integraron las listas municipales del BNG. Uno de ellos llegó a ser concejal en Melide

El pasado domingo, una concentración contra la tramitación del proyecto de la fábrica de celulosa de Altri llegó a las puertas del domicilio de la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez. Un espacio en el que convive con su familia -- «menores y personas de edad avanzada» según denunció ayer el conselleiro de Presidencia, Diego Calvo-- en el que los participantes en el escrache colocaron, además, una pancarta amenazante que rezaba «Ángeles, vecina, tú también tienes familia». Dos días después de lo ocurrido, la titular afeó este martes que en política «hay líneas rojas que no se deben cruzar» para lamentar que ella lleva «desde el año 1999 en política» y que «las críticas debo recibirlas yo como conselleira, y no mi familia».

El acto para denunciar el proyecto para fines textiles que la pastera lusa Altri proyecta en Palas de Rei , actualmente pendiente de la Declaración de impacto ambiental, se trasladó hasta el municipio de Melide, donde Vázquez vive de manera habitual. Según ha podido saber ABC, en el escrache, a escasos metros de la vivienda familiar, participaron al menos tres personas vinculadas con el BNG. Uno de ellos es Ramón Laia, que integró las listas municipales del partido en las elecciones de 2011 y 2015 y llegó a ser concejal en el concello de Melide. Lo acompañaban una exconcejala del Bloque en el mismo ayuntamiento entre 2016 y 2019, y el número 8 de la lista nacionalista para el concello de Toques en 2015. Todos ellos aparecen sujetando una de las pancartas en contra de la implantación de Altri en el municipio lucense.
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«Las familias no tienen que estar en el epicentro de ningún tipo de polémica, por lo que pido que lo sucedido el domingo en los alrededores de mi domicilio, no le pase a nadie más en Galicia» reflexionó la conselleira a preguntas de los medios. En su argumentación, Vázquez sostuvo que los gallegos «somos distintos», «hay unos centros de trabajo, una agenda pública y un Parlamento, nunca puede ser un domicilio el lugar para realizar una protesta, y mucho menos que la familia esté ahí como protagonista dentro de una pancarta» recalcó. Después de agradecer las disculpas »por parte de algún grupo político», la política manifestó que «yo estoy aquí para trabajar y no me va a amedrentar ningún grupo político, ninguna promotora ni ninguna empresa».
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