La borrasca Nelson pone al litoral gallego en alerta naranja en pleno Jueves Santo

Se trata de una profunda y extensa borrasca, nombrada por la AEMET, situada entorno a las islas británicas y cuyos efectos persistirán hasta la próxima semana, dejando en todo el país una Semana Santa pasada por agua. Una borrasca que no solo vino acompañada de abundantes lluvias y fuertes vientos, responsables tan solo en la jornada del miércoles de 162 incidencias –la gran mayoría en la provincia de Pontevedra, con 79–, sino que también trajo consigo el frío, llegando a registrarse temperaturas bajo cero de hasta -4 grados en el municipio orensano de A Veiga durante la madrugada, según Meteogalicia.

Este jueves, por su parte, Galicia continúa bajo la influencia de esta borrasca atlántica, que deja cielos nublados y chubascos generalizados en todo el todo el territorio. Pero el gran protagonista de la jornada es el viento, responsable de que todo el litoral gallego vaya a estar en alerta naranja por riesgo importante en el mar, con olas de entre 5 y 7 metros de altura y vientos de fuerza 8, de 62 a 74 kilómetros por hora a partir del mediodía, especialmente al norte de Finisterre. También a partir del mediodía quedan en alerta amarilla parte de las provincias de Pontevedra y Orense, por acumulaciones de lluvia en 12 horas superiores a los 40 litros por metro cuadrado.

La cota de nieve, por su parte, irá bajando de los 1.200 metros hasta los 1.000 a medida que avance el día. Eso sí, se esperan heladas débiles en cumbres de la montaña lucense y orensana, mientras que las temperaturas no sufrirán cambios significativos.

Con todo, Viernes Santo se espera que el temporal remita un poco, y con él lo harán también el viento y la lluvia. Pese a seguir bajo los efectos de Nelson, el nivel de alerta en la costa bajará a amarillo, con oleaje de entre 4 y 5 metros de altura y ráfagas de viento de 50 a 62 kilómetros por hora en el noroeste de la Coruña. La situación será más intensa en la vertiente atlántica, mientras que en el litoral de Lugo se desactivará el aviso a partir del mediodía. Y también se debilitarán las precipitaciones, aunque se esperan chubascos intermitentes, que serán más probables durante la mañana y en el oeste de la Comunidad, y que se mantendrán a lo largo del fin de semana y hasta la jornada del lunes.