El arte de revivir instrumentos de miles de años
El músico lucense Abraham Cupeiro estrenará el próximo mes en Galicia su nuevo proyecto, ‘Mythos’, grabado recientemente en los famosos estudios londinenses de Abbey Road
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Abraham Cupeiro, con el cornu romano que construyó
Los instrumentos de Abraham Cupeiro funcionan como una máquina del tiempo. A través de ellos es quien de transportar a su público al pasado y compartir melodías que resonaban hace miles de años. No es magia, pero podría, porque este musicólogo e instrumentista lucense devuelve ... a la vida sonidos que se quedaron olvidados en las ruinas de culturas de todo el mundo, como la celta, la griega, la romana o la persa. Especializado en música antigua, su trabajo no pasa desapercibido en el panorama internacional por hacer, con sus propias manos y desde su taller de Sarria, instrumentos de hace miles de años y tocarlos en escenarios de todo el mundo. Con todo, su Galicia natal es el destino de sus próximos conciertos, en los que estrenará su nuevo proyecto, 'Mythos', que acaba de grabar en los estudios londinenses de Abbey Road, conocidos por ser también los de iconos como los Beatles, Michael Jackson o Stevie Wonder o Freddie Mercury.
Cupeiro estudió trompeta en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid e hizo un máster en Interpretación de Música Antigua, pero su andadura en la recuperación de instrumentos milenarios no empezó hasta 2006, explica a este diario, cuando, como trabajo de fin de carrera hizo con sus propias manos una trompeta barroca del siglo XVIII. "A partir de ahí" se dio cuenta "de que podía construir instrumentos". Desde entonces, estudia, construye y trae de nuevo a la vida estos instrumentos en base a imágenes, representaciones o, en alguna ocasión, ejemplares hallados en yacimientos históricos.
Es, por ejemplo, uno de los únicos artistas que toca el karnyx, una trompa celta de la Edad de Hierro, que construyó en base a una representación en una moneda romana. Recientemente pudo compararlo con el único que ha aparecido entero hasta la fecha, el karnyx de Tintignac en 2004, del que solo dista en tres centímetros. Sobre unos planos de un ejemplar encontrado en Pompeya que se encuentran en el Museo de Nápoles, también recreó un cornu, un instrumento de viento de metal de la Antigua Roma, con una gran sonoridad que reconstruyó para componer 'O anel de pedra', un encargo para celebrar el aniversario de la muralla de Lugo como patrimonio de la humanidad; así como las trompetas que flanquean el Pórtico de la Catedral de Santiago, por un encargo de Carlos Núñez.
"El último" que recuperó, explica, "es un aulós griego, un doble oboe, que fui a ver en el Museo de Louvre". Simplemente observándolo, explica, "ya te das cuenta de las notas que puede dar", basándose en su propia experiencia y en las marcas que se pueden apreciar en el propio instrumento "donde están colocados los agujeros", que te muestran "lo que puede hacer", o "qué tipo de escala tienes que emplear, porque ya conoces instrumentos de otras tradiciones milenarias". "Es como si fueras un detective en una película, poniendo las pistas en un panel", compara, "las vas agrupando, y al final todo tiene que tener sentido, yo no fuerzo nada".
"Este instrumento es uno de los más iconografiados en la Grecia clásica", indica el musicólogo, del que hicieron referencia grandes pensadores como Platón o Aristóteles. "Su construcción se atribuye a la diosa Atenea; estaba siempre relacionado con Dionisio, el dios del Vino, y también se tocaba en las Olimpiadas", explica, haciendo referencia a su importancia en esta cultura. "Se le daba mucho uso, era un instrumento muy mágico y muy complicado de tocar, porque tienes que tocar dos tubos a la vez, y muy difícil de afinar", por no hablar, añade, de lo que implica introducirlo en una orquesta.
Más de 200 instrumentos
Como "recuperador de instrumentos ancestrales" autodesignado, Cupeiro tiene una colección de más de 200 instrumentos, de los que toca más de la mitad, habiendo construido con sus propias manos unos 50 de ellos. Algunos los ha mostrado por todo el mundo en los conciertos de sus antiguos proyectos, como 'Pangea', 'Sons esquecidos' y 'Resonando en el pasado'. También ha colaborado con eminencias de la industria, como Hans Zimmer o Harry Gregson-Williams, y recientemente ha trabajado en la banda sonora del documental de Steven Spielberg 'La vida en nuestro planeta'. Ahora, presenta su último proyecto, 'Mythos', grabado en diciembre en los estudios de Abbey Road con la Real Filarmónica de Londres, por los que han pasado los músicos más famosos del mundo. Además de poder escuchar en directo por primera vez instrumentos como el cornu o el aulós, quienes se acerquen podrán disfrutar de un concierto dedicado a las mitologías antiguas, como la griega, la celta o la persa, "una de las más importantes" de su época.
También habrá piezas romanas, irlandesas, y un tema dedicado a Atlantis, explica, la ciudad perdida, "porque los seres humanos miramos mucho al espacio pero el océano sigue siendo algo muy desconocido que estuvo siempre en la cabeza de la gente. Porque las mitologías, al final, no dejan de ser alegorías que representan una inquietudes que están en el imaginario de los pueblos", reflexiona.
Estreno en Galicia
El formato digital del disco saldrá a la venta la segunda semana de febrero, y en formato físico a principios de marzo, pero quienes quieran escucharlo antes podrán acercarse a Ferrol el próximo día 1 para disfrutar de su estreno en directo en una gira que, además, pasará por Orense, Santiago y Lugo los días 1, 2 y 22 de marzo, respectivamente. Lo hará de la mano de la orquesta Gaos y con el apoyo de la Xunta y de Turismo de Galicia.
"Como siempre estoy tocando fuera, la verdad es que estoy muy emocionado de poder estrenar este proyecto en mi tierra" y "poder llevar de primera mano mi música a mi gente antes de que esté dando vueltas por el mundo", reflexiona Cupeiro, que este año también tiene ya previstos conciertos en Madrid, Córdoba y Alemania, entre otros lugares. "Estoy muy contento y con muchas ganas de hacer que el público se emocione".
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