Alianza de Reganosa, Repsol y Naturgy para crear una red de plantas para producir biometano

Según Impulsa Galicia, para completar la primera fase del proyecto se necesitará una inversión de 146 millones de euros. La idea es tratar anualmente 1.240.000 toneladas de purines excedentarios. Con ellos se producirían fertilizantes orgánicos, CO2 neutro y unos 300 gigavatios hora (GWh) de biometano que se inyectarían a la red de gas natural. Este gas renovable se utilizaría para descarbonizar distintos sectores, como el del transporte, el residencial y el industrial, pudiéndose emplear en los procesos de la refinería de Repsol en A Coruña.

«Completada esta fase inicial, la intención de los promotores es ampliar el proyecto de economía circular en el futuro a toda Galicia, implantando una red centralizada de tratamiento de los excedentes de deyecciones ganaderas», indica Impulsa Galicia. Si el proyecto global logra estar en marcha el número de toneladas de purines tratadas se elevaría hasta los 6 millones. El biometano producido llegaría a 1 TWh anual, lo que equivale más o menos a un 7 % del gas natural de importación que ahora se demanda en Galicia. Estas cifras permitirían evitar «la emisión a la atmósfera de unas 500.000 toneladas anuales de CO2 y se crearía empleo de calidad en el marco de la transición ecológica y en lugares poco poblados«, destaca Impulsa Galicia. Según los cálculos de la sociedad, la puesta en marcha de esta red de plantas generaría 600 puestos de trabajo directos y 1.900 indirectos, contabilizando tanto los necesarios para la explotación de las plantas como para la logística de transporte.

El proyecto ha sido ya presentado a cuatro ministerios del Gobierno central (Economía, Transición Ecológica, Agricultura e Industria) con el objetivo de encajarlo en los fondos Next Generation, «tanto por su componente de circularidad como por el hecho de que proporciona una fuente de energía verde y autóctona a partir de los excedentes de las deyecciones ganaderas». Al instalarse en una zona afectada por el cierre de la central de carbón podría optar también a los fondos de Transición Justa.

Además de avanzar en la producción de energías renovables, con el proyecto se pretende mejorar la gestión de los purines, que en una comunidad ganadera como la gallega empiezan a suponer un problema medioambiental. «La ejecución de esta iniciativa contribuiría al cumplimiento de la nueva legislación medioambiental europea sobre protección del suelo agrícola y control de efluentes, así como de nutrición sostenible de suelo agrario, y daría solución a cuestiones recurrentes en la gestión y almacenamiento de purines«, indica Impulsa Galicia.

Un proyecto al que se refirió el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, durante su intervención en el pleno desarrollado en el Parlamento de Galicia; concretamente, durante la sesión de control, las preguntas de la oposición, y al ser interpelado por la portavoz del BNG, Ana Pontón. Rueda, además de enfatizar que este proyecto «sirve para solucionar un problema que tienen nuestros ganaderos», y trasladar el respaldo de la Xunta, demandó la implicación del Ejecutivo central, informa Pablo Pazos.

El mandatario preguntó a la oposición si «vamos a tener su apoyo para que el Gobierno de España, por lo menos a este proyecto, le mire a los ojos, le dé apoyo y podamos crear estos puestos de trabajo». «¿Les puede importar?», preguntó directamente al BNG, tras denunciar que les da «exactamente igual» lo que ocurra con los fondos Next Generation; un tema que «no merece un minuto de su tiempo». Una postura ante la que mostró su malestar, pues si bien comprende que el PSOE tiene que «tapar las vergüenzas» del Gobierno, no tiene esa excusa el Bloque, donde se arrogan el papel de «defensores» de Galicia.