El alcalde de Cambre dimite por no poder pagar facturas pese a tener las arcas llenas
Afirma que las trabas puestas por dos altas funcionarias son la causa del bloqueo
Incautan en este municipio uno de los mayores alijos de cocaína de la historia de Galicia: siete toneladas en un polígono industrial
SANTIAGO
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEl alcalde de Cambre (La Coruña), Óscar García Patiño (Unión por Cambre), renuncia al bastón de mando. Este jueves ha anunciado su decisión de dimitir ante una situación de bloqueo administrativo del consistorio que ha dado pie a impagos de facturas a empresas concesionarias ... hasta acumularse una deuda cercana a los 5 millones de euros, pese a que las arcas municipales cuentan con más de 20 millones. ¿La razón? Según el regidor saliente, una serie de «cambios» en los «criterios» que rigen el funcionamiento de su órgano impuestos tras la llegada de la nueva interventora y la secretaria municipal, a quienes señala cómplices de una «animadversión» dirigida contra él; y cuya gestión, acusa, habría hecho imposible regularizar y efectuar los pagos.
El último percance de magnitud llegó cuando la suministradora de gasoil suspendió su servicio por deudas pendientes por parte del Ayuntamiento —un total de 28.057,28 euros—, pero la misma inestabilidad se extiende a otras firmas. El servicio de aguas y saneamiento de la concesionaria Augaservi, a la que el órgano municipal debe en torno a 300.000 euros, iba a decidir su cese pero, en el pleno de esta semana, la corporación logró evitarlo acordando pagos parciales. La empresa de iluminación pública, AVE Iluminación, que actualmente se sustenta con los cobros de sus denuncias por impagos, también se plantea una retirada del municipio. Y a esto hay que añadir que hasta febrero estuvo activa una huelga en el servicio de limpieza municipal —que ahora está suspendida, pero no desconvocada—, cuya firma, Jardincelas, también es un gran acreedor de las arcas públicas. Una situación de inseguridad frente a la disponibilidad de servicios básicos que tiene en vilo a los cerca de 25.000 vecinos del municipio.
En este escenario es en el que se produce la renuncia del regidor. Su incomodidad en el puesto ya la había declarado él mismo, a finales del pasado año. Fue entonces cuando acusó a las nuevas interventora y secretaria municipal de imponer mayores restricciones en los criterios de aplicación sobre los pagos y dar pie a los problemas que, ahora, se han acumulado como una bola de nieve. «La situación que se está viviendo en el Concello me está afectando personalmente», hasta el punto de sentir «vergüenza», expresaba el regidor en octubre, cuando anunció la anulación voluntaria de su nómina.
Fruto de una «animadversión»
El germen del problema, consideraba, se debía a un aspecto que «jamás se ha querido afrontar a nivel nacional»: que «la administración local, en general, arrastra graves problemas debido, sobre todo, a que la administración pública no ha sabido adaptarse a la actual sociedad, con trámites administrativos tediosos y lentos que poco o nada son acordes con una sociedad que vive a una velocidad de vértigo«. El jueves, fue más directo y atribuyó los reparos en el pago de facturas por parte de las dos funcionarias a una «animadversión» hacia su persona. Por eso, ha dicho, considera que su renuncia calmará las aguas y facilitará la gestión en el Consistorio: «No soy el problema, pero sí la solución», ha terciado a la hora de justificar su salida. García Patiño ha insistido en que en las arcas municipales hay más de 20 millones de euros para hacer frente a una deuda colectiva con proveedores que cifró en «cinco». «No es un problema de solvencia, Cambre no está en bancarrota», apostilló.
«Qué pretenden, no lo sé. Paralizar el ayuntamiento sí lo están consiguiendo; no se puede pagar si no hay un informe de una interventora», ha censurado el mandatario, reprochándole también a ella y a la secretaria que acordasen, sin contar con él, cambios de última hora en la elaboración de convenios. Ha afeado que esa ausencia de diálogo fuese la norma y ha considerado, sin dudar de que todas las partes defienden actuar cumpliendo la ley, que su «interpretación» puede ser «amplia, como el interés general» o «más restrictiva», opción por la que dijo que optan ambas.
Pese a todo, ha asegurado que no abandona la política y que, de hecho, seguirá al frente de Unión por Cambre. «Entré como Óscar García Patiño y marcho igual», añadió al final, insistiendo en que su ilusión era ser regidor de su municipio y en que no concurrió a las elecciones con otros objetivos.
El suministro de combustible, interrumplido
En cuanto a la problemática más reciente, la de los impagos a la suministradora de gasoil y su consecuente suspensión del servicio, se hizo evidente el 29 de febrero, con un aviso por parte de la empresa indicando que pondría fin a esta prestación a partir del 1 de marzo. Según las mismas fuentes, «se trata de facturas que fueron informadas con omisión de fiscalización por parte de la interventora municipal»; un modelo que, abundan, «dilata los tiempos de pago» porque «supone que el departamento técnico tiene que emitir un informe respondiendo a la intervención (...). Por su parte, la intervención tiene que informar de nuevo y determinar si el expediente va o no a revisión de oficio». Después se abre el expediente, se da audiencia a la empresa afectada «y el expediente se traslada al Consello de Contas, que estipula cómo se paga la factura».
El mismo día en que se recibió el aviso de la empresa, aseguran, fue trasladado a la secretaria y a la interventora preguntando por las posibles vías de solución para esta cuestión. «A día de hoy, la consulta fue respondida, únicamente, por la secretaria, que respondió indicando que la situación tiene como origen la inexistencia de un contrato escrito entre la empresa y el ayuntamiento, pero que no plantea ninguna posible solución», sostienen. Ahora, el departamento de Servicios está trabajando «en la elaboración de un contrato puente para el servicio de gasoil y calefacción (...). A mayores, y mientras no se disponga de este contrato, el gobierno local está analizando la viabilidad de utilizar vales de caja para abonar este suministro».
En este contexto, un vehículo policial se quedó este martes sin combustible, aunque el consistorio lo atribuye a que se utilizó estando el depósito en reserva. «El coche acabó por quedarse sin combustible, por lo que, como es habitual en este tipo de situaciones, las posibilidades pasaban por llenar el depósito llevando un bidón o dar aviso a la grúa para que retirara el coche», apostillan las fuentes consultadas.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete