Núñez Feijóo acalla las críticas y saca hoy a la luz las facturas de la Xunta

Pero aunque Alberto Núñez Feijóo siempre presume de las «cuentas ordenadas» del Ejecutivo autonómico, la oposición -y especialmente el líder de los socialistas gallegos, M anuel «Pachi» Vázquez- ha labrado una campaña electoral destinada a socavar el equilibrio presupuestario en las cuentas públicas. Por ello, Feijóo ha querido dar una vuelta a su discurso y enseñar las facturas de la Administración autonómica durante esta legislatura, unos recibos que certifican el saneamiento y la solvencia de las cuentas.

Así lo afirmó ayer el titular del Ejecutivo autonómico -previamente en una entrevista concedida a ABC Punto Radio y después en un desayuno-coloquio celebrado en Lugo-, quien avanzó que presentará «los datos de pago de facturas» hoy mismo en la tradicional rueda de prensa tras la reunión semanal del Consello de la Xunta para que «quede claro» cómo afronta sus deudas Galicia. Un exposición que llega como contestación a las críticas vertidas por el candidato del PSdeG, quien ayer señaló que el «desvío» de gastos en las cuentas de Galicia en 2011 «puede superar los 600 millones», «según los datos que manejamos nosotros», esgrimió Vázquez.

Frente a estas afirmaciones, Feijóo certificó que «si las cuentas estaban maquilladas» y la Xunta no tuviese «dinero» los que inmediatamente le denunciarían serían «los proveedores, las personas que tienen contratos con la Xunta, las farmacias, los centros de educación y sanidad» . Si bien es cierto que en Galicia se registran ciertas tensiones de tesorería, la Comunidad «paga y tiene sus cuentas ordenadas», en contraste con otras autonomías que ahora «está ocupadas y muy preocupadas por intentar pagar lo que deben», puntualizó.

Una asignatura superada en el territorio gallego que, entre otras cosas, permite que los proveedores cobren sus facturas en menos de 50 días y que «las farmacias cobren en los cinco primeros días de cada mes» , afirmó el presidente del PP gallego.

Y como ejemplo de este equilibrio, Feijóo destacó la confianza que genera la Comunidad, una confianza que ha hecho posible que empresas como Pemex se interesen por invertir en ella. Precisamente los contratos firmados entre la petrolera mexicana y los astilleros de Barreras y Navantia han focalizado los reproches de los socialistas gallegos durante esta pugna electoral, una actitud que ayer reprobó el candidato del PPdeG, Pedro Puy.

«Los socialistas llevan tergiversando y dañando la imagen de Galicia en temas tan importantes para el futuro de nuestra economía como el supuesto desvío de cuentas , negando los contratos subscritos con la petrolera Pemex o sembrando dudas sobre la solución para el problema de suministro eléctrico de Alcoa», constató.

Ahora, y con Pemex en un segundo plano, «Pachi» ataca a las cuentas públicas y acusa a Feijóo de guardar «silencio» . «El buque insignia de este Gobierno, que era el déficit, era mentira», apuntó, al mismo tiempo que se comprometió a «no engañar a nadie: El primer día que gobierne este país, levantaré las cuentas y le diré a la gente la verdad». Una promesa a largo plazo que, sin embargo, el candidato del PPdeG se compromete a destapar hoy.

En contraposición a los comentarios de «Pachi», Puy le recordó que en campaña electoral «no vale todo y el señor Vázquez no puede manipular la realidad y negar la evidencia sobre la situación de la economía de Galicia con el objetivo de ganar protagonismo».

Un discurso del miedo extendido entre la oposición y que contrasta con el emitido por el líder del PP gallego, quien en todos los mítines lanza un llamamiento a la «unidad». Así lo repitió ayer, alegando que Galicia «se merece un gobierno unido y centrado en resolver problemas y no uno dividido y descentrado por la competencia interna» , en referencia a las posibles coaliciones entre PSdeG, BNG e incluso la formación de Xosé Manuel Beiras y Yolanda Díaz llegado el momento. En clara alusión a los grupos nacionalistas -tanto gallegos, vascos y catalanes-, Feijóo sentenció en Punto Radio: «Me preocupa que agiten sentimientos para no tener que pagar facturas».