La Xunta aprueba el techo de gasto para 2020 con 311 millones más, un incremento del 3,1%

El incremento de 311 millones supone 52 menos con respecto a la subida del año previo, pero Feijóo ha subrayado que «aún así» se produce nuevamente un alza en el techo de gasto. Una disminución que se explica por la necesidad de optar por un techo de gasto «realista, sólido y prudente» , ante «todas las zancadillas y dificultades» que motiva el gabinete Sánchez, que ni presentará sus Presupuestos ni acepta reunir al Consejo de Política Fiscal y Financiera. A esto se suma «la desaceleración de la economía europea y española y la inestabilidad política que está sufriendo España». Y que Galicia sigue sin percibir los 700 millones de euros que le adeuda el Estado.

Feijóo ha insistido en que la Xunta ha optado por una posición de prudencia, pero ha puesto en valor que «este es un gobierno que gobierna», y que aporta «certezas y estabilidad» en un contexto marcado justamente por el clima contrario, adoptando, eso sí, la «solución más difícil»: sacar sus cuentas anuales a pesar de no disponer de referencias fundamentales que solo puede proveer el Gobierno central.

El techo de gasto se apoya en un cuadro macroeconómico revisado a partir de los datos con los que cuenta la Xunta. Así, la previsión de crecimiento del PIB queda fijada en el 2% para este 2019, en línea con el español, mientras que para 2020 será una décima inferior, en el 1,9%, también en línea con España y por encima tanto de la Eurozona como de las principales potencias europeas. En cuanto a la tasa de paro, el Gobierno gallego espera que este año se cierre en el 11,4% y que 2020 concluya en el 10%. Se encadenarían así siete años de crecimiento con bajada del paro.

El conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, ha admitido que «la situación ha cambiado bastante» con respecto a 2018, dado el actual contexto de desaceleración. Entonces, la Xunta trazaba un horizonte de crecimiento del 2,5%, dos décimas por encima de la última revisión. Por el contrario, se planteaba una tasa de paro del 12,7%, más de un punto por encima de lo que ahora se contempla.

Con este cuadro, ha hecho hincapié Núñez Feijóo, « la Xunta va a volver a cumplir los objetivos de regla fiscal y déficit público para 2020 », así como de pago a proveedores. También se ceñirá al plan estratégico 2015-2020, que planteaba un crecimiento medio del 2,5% que «en este momento se está cumpliendo». También se contemplaba el 10% de paro que espera alcanzar el Ejecutivo autonómico.

La capacidad de gasto, ha destacado Martínez, se ha incrementado en 1.724 millones en los últimos 5 años . Los 10.160 millones de techo de gasto para 2020 se desglosan en 10.112 de ingresos no financieros, 68 de endeudamiento y -20 de ajustes de contabilidad nacional. La Xunta solo prevé un déficit del 0,1%, con la previsión de bajar una vez más, el próximo año, el ratio deuda/PIB. Es decir, estabilidad sin endeudamiento. Galicia es la comunidad que menos ha incrementado su endeudameinto en la última década.

El conselleiro de Facenda, en su intervención, ha subrayado que el objetivo es « seguir manteniendo un crecimiento sano al tiempo que nos estamos preparando para la próxima década ». Para mantener dicho crecimiento «es muy importante la estabilidad, que tenemos, que nos permite blindar la autonomía y ejercer en plenitud el autogobierno. Con la decisión de tener un presupuesto para 2020 en tiempo y forma estamos aprotando normalidad, estabilidad y confianza», previniendo el contagio de la incertidumbre a nivel nacional.

El Consello remitirá la propuesta de techo de gasto al Parlamento para su debate y votación en el Pleno de la próxima semana , presumiblemente el miércoles. La aprobación del techo de gasto es el paso previo a la entrada del proyecto de Presupuestos de 2020 en la Cámara. El objetivo es que queden aprobados antes del 20 de octubre.

Se trata del noveno techo de gasto -el desembolso máximo a la hora de elaborar las cuentas anuales- al que de luz verde la Xunta. El primero se aprobó en el Parlamento en 2011. Desde aquel año, el Gobierno autonómico ha cumplido siempre con este trámite , fijado en la ley de disciplina presupuestaria.

Todo ello, sin que la Xunta sepa aún si va a disponer de los 700 millones que le adeuda el Gobierno. Feijóo, a preguntas de los periodistas, ha advertido de que Galicia « no va a pasar ni de broma por condonar un solo euro de la deuda real y líquida que tiene el Gobierno central contraída».

En este sentido, y tras anunciar Pedro Sánchez en un mitin que se pagarán las entregas a cuenta antes de las elecciones del 10-N, tras meses asegurando que la ley lo impedía por estar el Gobierno en funciones, Feijóo ha advertido: « Si se pretende pagar una parte y dejar a deber otra parte , la posición de Galicia» no ha cambiado «un ápice» y sigue siendo inamovible: debe recibir los 700 millones que le corresponden.