Trabajadores de Alcoa exigen un plan industrial y garantías para la plantilla

Tras los rumores de venta que la multinacional evitó confirmar matizando que se barajan «varias opciones» en el marco de una revisión de viabilidad desarrollada a nivel mundial en las plantas del grupo, y que claramente afectarán a las gallegas (solo una de las dos de Lugo y la de La Coruña) y asturiana, la dirección de estos centros se reunía ayer con los representantes de la plantilla. Con el objetivo de «calmar los ánimos», según pudo confirmar ABC, explicaron que las vías abiertas por la aluminera pasan, bien por «la incorporación de un socio industrial, la venta de activos o, incluso, cambios en la producción».

Un mensaje que en poco o en nada tranquilizó a los trabajadores que ayer insistían en reclamar un encuentro con el presidente de Alcoa en España para que se les informe de este proceso y de la segregación a nivel mundial. También quieren detalles sobre la previsión de cara a la subasta de interrumpibilidad eléctrica prevista para este verano. Desde Lugo y La Coruña , sendos comités de empresa, n o descartaban una contestación contundente en caso de que la compañía, líder mundial en la industria del aluminio, no fuera capaz de ofrecer las garantías que exigen.

Desde la celebración de la primera subasta de interrumpibilidad hace ya dos años, las plantas gallegas y asturiana de Alcoa se han visto amenazadas por los recortes y la deslocalización . Pese a ser la gran beneficiada de estos contratos, que se ofrecen a los grandes consumidores de electricidad por reducir su actividad cuando lo requiera el sistema eléctrico (recibe al año cerca de 140 millones de euros), la compañía anunció a mediados de 2015 su intención de recortar la producción en 500.000 toneladas anuales.

  En este sentido, el representante de UGT en el comité de empresa de la fábrica de Alcoa en San Cibrao (Cervo) y miembro del comité europeo de la compañía, José Luis Combarro , no ocultó el «desconcierto» que la noticia ha causado entre la plantilla de la Mariña luguesa, pues la planta «obtuvo beneficios el año pasado». Con 2.000 trabajadores empleados en sus dos centros de Lugo, es el principal motor económico de la zona.

Según indicó, durante la última reunión del comité europeo, celebrada los pasados día 11 y 12 de mayo, «no se habló para nada de la posibilidad de que hubiese una venta , solo se informó de que se iban a realizar varios análisis de viabilidad por parte de empresas especializadas».

El desfile de posibles inversores en las últimas semanas hizo sospechar a los trabajadores de que la compañía norteamericana podría estar pensando en deshacerse de varios de sus activos industriales. Es más, apuntan a que ya podría haber un grupo interesado en la compra de parte de Lugo y La Coruña , si bien no han trascendido mayores detalles por razones de confidencialidad.

Preguntado al respecto de este tema, el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde , afirmaba ayer que « estará siempre apoyando a Alcoa y garantizando que la presencia de un proyecto industrial tan estratégico para Galicia se pueda consolidar». La orden de interrumpibilidad «tiene que responder en términos de certidumbre y estabilidad y unos ingresos para el conjunto de las empresas electrointensivas», advirtió.