Toque de queda: Feijóo achaca la falta de acuerdo a la «improvisación» del Gobierno

Feijóo, que ha comparecido desde la localidad lucense de Burela antes de que Pedro Sánchez realizara su declaración institucional, ha insistido en que las decisiones que se adopten ante el Covid «han de ser proporcionadas y proporcionales al territorio donde se van a aplicar » y allá donde se necesiten. «Hoy pueden ser unos y mañana pueden ser otros», ha marcado distancias con las zonas más castigadas de España en comparación con Galicia, una de las comunidades autónomas con menor presión asistencial.

Feijóo ha insistido un día más en que el Gobierno gallego es partidario de aplicar restricciones, incluidas las nocturnas , tanto de horarios como de movilidad, llegado el caso, y de hecho Galicia ya ha ido implementando diversas limitaciones, restringiendo casi a su mínima expresión la celebración de reuniones familiares y sociales, por lo que ve «sensato» que se aborde el debate de aplicar esas restricciones en horario nocturno. Pero siempre atendiendo a criterios epidemiológicos y discriminando por territorios.

Lo que menos le gusta a Feijóo son las «denominaciones» de estado de alarma y toque de queda. Lo dijo este jueves y ha insistido un día después. Considera que « no aportan nada a la necesidad de la convivencia con el virus y de seguir dando docencia, yendo a trabajar y que nuestro país funcione». «Si volvemos a activar el estado de alarma y toques de queda a toda la población, indiferenciada, volvemos a mandar otra vez un mensaje con la peor gestión de la pandemia del mundo », el cual «nos perjudica como país».

« Restricciones, sí, sin alarmismos, pero con contundencia », ha glosado Feijóo. «A veces en nuestro país se crea mucha alarma y poca contundencia. Debemos ser contundentes contra el virus y no crear una alarma que afecte a la economía, las empresas y la prestación de servicios públicos». En la misma línea, ha demandado « sosiego y un poco de profesionalidad en la gestión, abandonar las tesis sobre estado de alarma y toque de queda», para no «tensionar de una forma innecesaria a la población y sin hacer efecto llamada al resto de países del mundo».

El presidente de la Xunta ha lamentado, igual que el jueves, el «coste reputacional» de este tipo de «terminologías» con las que se está «alarmando al mundo». Su receta pasa por ir « arreglando las cosas en casa de forma clara y no llamando la atención al resto de la comunidad internacional para que señalen a España como uno de los lugares donde peor se ha gestionado la pandemia». También deplora Feijóo que se vea cuestionado el servicio de salud, «uno de los mejores del mundo», algo que considera «injusto».

A ojos del mandatario autonómico « solo nos faltan dos cosas: una ley para gestionar la pandemia y coordinación en los criterios para activar las distintas herramientas jurídicas que en cada territorio se necesiten». No ha dejado perder la ocasión el presidente gallego de reclamar de nuevo, como viene haciendo «desde hace tiempo», disponer de «una ley que regule la pandemia» y permita adoptar decisiones como restricciones de actividad y movilidad, por el día o por la noche. Pero sin estado de alarma. Y sin llamarlo toque de queda.