La Xunta reabre el interior de A Mariña al no apreciar riesgo y limita las restricciones a la costa

El conselleiro Jesús Vázquez Almuiña, acompañado por el gerente del Sergas, Antonio Fernández-Campa, y el director xeral de Saúde Pública, Andrés Paz-Ares, ha avanzado que seis municipios del interior de la comarca (Ourol, Alfoz, Mondoñedo, Lourenzá, Trabada y O Valadouro; en total la componen catorce) y uno costero (O Vicedo) quedarán a partir de mañana libres de las restricciones vigentes desde este lunes. La razón de ello es la baja incidencia acumulada en los últimos tres días, con pocos o ningún contagio registrados en dichos concellos. La Consellería considera, por tanto, que el riesgo es escaso.

El escenario será, en cambio, distinto en la costa, donde el impacto del rebrote ha sido mayor: en Viveiro, Xove, Cervo, Foz, Barreiros y Ribadeo la movilidad permitida se restringirá únicamente a desplazamientos entre ellos, por lo que los residentes ya no podrán ir a los municipios del interior, como sí habían tenido posibilidad a lo largo de esta semana. Por último, Burela, epicentro del foco y que acumula el 80 por ciento de los casos, queda desde esta medianoche totalmente cerrado al exterior .

La nueva orden se emitirá en el DOG de mañana, pero esas serán, en esencia, las únicas modificaciones respecto al documento anterior. Mientras que hasta ahora toda la comarca se encontraba cerrada y los desplazamientos sí estaban permitidos de un municipio a otro dentro del propio distrito, con este nuevo mapa una parte queda nuevamente abierta al exterior y otra recluida en sí misma con el fin de evitar una expansión descontrolada de la enfermedad. Se trata, en palabras del conselleiro, de crear «un cinturón de seguridad» para proteger el exterior de la zona más afectada ahora mismo.

El resto de medidas , como el uso obligatorio de mascarilla dentro de la región, los límites horarios y de aforo en locales y otros espacios y el número máximo permitido de personas en encuentros sociales, se mantienen intactos en los catorce municipios. La orden volverá a ser revisada dentro de cinco días para introducir cambios pertinentes si así se decidiera.

Durante la comparecencia, los responsables de Sanidade hicieron especial hincapié en que el brote está «controlado» . Y esgrimieron dos motivos: uno, que todos los contactos están rastreados y estudiados, por lo que no se ha perdido la pista del virus por ahora. Y dos, que tres de las cinco personas vinculadas al foco y que permanecían ingresadas en el Hospital de Burela recibieron ayer el alta, lo que da cuenta de la evolución favorable del brote a pesar del alto número de infectados activos en estos momentos.

En este sentido, el gerente del Sergas, Antonio Fernández-Campa, informó del último parte de contagiados totales en la comarca. Fueron 182, 17 más que el día anterior . Hasta la última hora del jueves se habían realizado 3.200 pruebas PCR, 708 personas se encontraban aisladas en la comarca de A Mariña y otras 27 habían superado la enfermedad desde que el brote fue detectado el pasado 23 de junio.

Otro de los asuntos a los que se refirió Vázquez Almuiña fue la llegada a la Comunidad de casos importados, como el hombre de 44 años ingresado el jueves en la UCI del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo tras haber llegado en autobús desde Madrid. «Lo único que le pedimos a Sanidad Exterior, lo que nos gustaría, es que informe de que una persona como ésta viene a Galicia para poder hacerle una encuesta epidemiológica en cuanto llegue, pero no se nos están ofreciendo esos datos», apuntó, aclarando que «por suerte, los contactos de este hombre al llegar a Vigo fueron mínimos porque se dirigió directamente al hospital».