El riesgo de sufrir cáncer de los voluntarios del Prestige desapareció a los 7 años

Siete años después de la tragedia del Prestige, el riesgo de padecer cáncer en las personas que participaron en la limpieza del fuel en las playas gallegas desapareció por completo . Así lo constata un estudio elaborado por un equipo de la Universidad de La Coruña que extrajo muestras de los voluntarios poco después de su trabajo en la costa y que volvió a tomarlas transcurridos unos años. El primero de los estudios se realizó para comprobar si la exposición al fuel tenía un efecto sobre la salud, como alteraciones a nivel genético en las células. Los participantes eran, en un primer apartado, estudiantes universitarios que tras el hundimiento se trasladaron a la costa. Un segundo grupo de estudio estuvo formado por marineros y pescadores que se encargaron de la limpieza de las rocas con máquinas de hidropresión y que estuvieron más tiempo expuestos al combustible.

A todos ellos se les hizo una prueba de daño genético que constató un aumento de ese daño menor y más fácilmente recuperable en los que estuvieron menos tiempo en las playas. Tras un seguimiento que se realizó años después, y en el que participaron un total de 55 personas , el equipo de la UDC liderado por la profesora titular de Psicobiología, Blanca Laffon, demostró que «siete años después esas personas ya no tenían un incremento de daño genético en sus células». O lo que es lo mismo, que a los siete años de haber estado en contacto con el fuel, estas personas tenían el mismo riesgo de sufrir un cáncer que otras que no habían participado en las labores de limpieza del Prestige .