Hazte premium Hazte premium

Alberto Varela - Crónicas Atlánticas

Políticos rana

Si algo ha aprendido el rupturismo gallego es que al confeccionar una lista electoral hay que ir con ojo

Los políticos tienen los mismos defectos que la gente de la calle. Unos son honestos y otros aprovechados, los hay que se creen por encima de los demás e incluso con problemas graves de autoestima. Fanfarrones y humildes, trabajadores y vagos. Igual que en la calle. No se les puede exigir que sean perfectos, pero sí que actúen con ejemplaridad. Que nadie saque pecho, representantes públicos que han abochornado a sus compañeros los ha habido en todas las épocas e ideologías pero en estos últimos meses en Galicia ganan por goleada los de las Mareas.

Si una lección ha aprendido el rupturismo gallego es que a la hora de confeccionar una lista electoral hay que ir con ojo. El listón que vale para la calle no sirve para la política, porque a un concejal o diputado —por no decir a un alcalde, conselleiro o presidente— se les exige una ejemplaridad que no rige para cualquier hijo de vecino. No se trata sólo de cumplir con el Código Penal, sino de asumir modelos de conducta que socialmente sean aceptados y que dejen ver buenas intenciones, porque quien abusa de los demás en el ámbito privado mal panorama pinta para manejar lo público.

En el grupo parlamentario de En Marea han renunciado ya dos diputados; uno por inventarse una ingeniería y otro por un incidente con la policía local de Pontevedra que está aún por aclarar. En sus escaños se sientan también la polémica Paula Quinteiro —que intentó hacer valer su acta para evitar la identificación de un sospechoso de vandalismo— y una compañera que ha reconocido ser titular de un vehículo sin seguro que se vio implicado en un accidente de tráfico. Todos ellos tienen derecho a defenderse en los expedientes administrativos o judiciales que se les abran, y ojalá puedan probar que todo fueron malentendidos y encadenamientos de circunstancias que les han llevado a parecer inmorales e infractores cuando no lo son. Pero ¡concho! no me digan que no es llamativo que de 14 al menos 4 hayan salido rana. Y para colmo, que estén dirigidos por un juez. Vivir para ver.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación