«El puño me impactó como una piedra», relata el reportero agredido en Orzán

El redactor sufre una fractura de nariz tras recibir un puñetazo de un joven cuando fotografiaba la búsqueda de los desaparecidos en La Coruña

«El puño me impactó como una piedra», relata el reportero agredido en Orzán efe

m. arrizabalaga

Diez días con la nariz escayolada y una sutura en el labio. Así ha abandonado esta mañana el centro hospitalario de La Coruña el reportero de La Voz de Galicia , Emiliano Mouzo , después de resultar agredido por un joven esta mañana cuando ... informaba de la búsqueda de los desaparecidos en la playa de Orzán.

Mouzo había llegado sobre las siete de la mañana al arenal coruñés, alertado por el periódico, donde ya se había puesto en marcha el dispositivo de búsqueda y rescate de tres agentes de policía y un joven de Erasmus . En el paseo marítimo observó a un grupo de tres o cuatro jóvenes junto a varias ambulancias, rodeados de agentes de policía. Uno de ellos estaba envuelto en una sábana hospitalaria, por lo que dedujo que era el joven que había logrado salir del agua.

Mouzo se dirigió hasta allí, dispuesto a hacer las primeras fotografías. «Uno de ellos me gritó algo que no entendí», relata el periodista, al que pronto un policía se acercó para pedirle que se separara un poco del grupo porque «están muy nerviosos»

Se alejó unos pasos y cuando se volvió de nuevo hacia ellos, un joven eslovaco «alto y fuerte» le propinó un fuerte puñetazo en la cara que le rompió los huesos propios de la nariz y le tiró al suelo. «Intentó seguir golpeándome en el suelo, pero lo detuvieron» , cuenta Mouzo, que posteriormente pidió a la Policía que lo dejara en libertad. «No justifico lo que hizo, pero entiendo que estaba nervioso», añade.

A sus 47 años -16 de ellos trabajando en La Voz de Galicia- , es la primera vez que Mouzo resulta agredido por tratar de informar. Llevaba un iPhone 4-S del periódico con el que, mediante el sistema iVoz, estaba redactando la noticia para publicarla directamente en la página web del diario. Por eso, explica, «no lo vi llegar». «El puño me impactó como una piedra» , añade. Aún no ha decidido si presentará o no denuncia.

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