La Xunta pone un «notable alto» a la extinción del fuego en las Fragas del Eume

Las malas condiciones de viento, explicó Quintana, impidieron un ataque a «la cabeza del fuego». El caso se vio agravado por la aparición de nuevos focos, que tuvieron que ser provocados al producirse en contra de la dirección de las rachas , en municipos colindantes. En el distrito forestal de Ferrol se contabilizaron nueve fuegos ese mismo día.

Quintana cuantificó en 19 minutos el tiempo en que tardaron efectivos contra incedios en llegar a la zona y reiteró en dos ocasiones que un llamada de un ciudadano avisando de un posible caso unas horas antes de estallar la crisis fue revisada por dos técnicos, que en su parte oficial desactivaron esta alerta.

Durante su intervención, fue desalojado de la cámara un ciudadano que llevaba una pancarta con el lema «Salvemos las Fragas del Eume» y gritó «No más fuegos en Galicia» (en su versión en gallego, empleando la fórmula nacionalista «Galicia»).

Quintana confirmó que el fuego se originó en tres zonas del municipio de A Capela . De las 9.125 hectáreas del parque, se vieron afectadas 370 de las de mayor protección, el 4,05%, y con menor gavedad de la que se temía en un principio.

La comparecencia de la consejera (mañana habrá otra por este tema en el Parlamento), a la que replicaron duramente desde la oposición, desató una mañana de cruce de acusaciones entre las tres fuerzas políticas con representación en la Cámara gallega, con alusiones a capítulos de la legislatura anterior como la grave oleada de incendios del año 2006.

La nacionalista Tareixa Paz censuró a Quintana por no haber aclarado «cómo y dónde empezó el incendio» y centró su discurso en el «recorte» en la prevención y las ayudas a los municipios y propietarios. Por su parte, la socialista Sonia Verdes responsabilizó a la Xunta de haber causado «el mayor desastre medioambiental de las últimas décadas» y pidió la asunción de responsabilidades.