El Gobierno estudiará si As Pontes puede producir con biocombustibles

Desde el pasado mes de abril, la central térmica ha estado prácticamente parada. La escalada de precios en los mercados del CO2, el principal gas responsable del cambio climático, disparó los costes del megavatio producido con carbón. Tanto As Pontes, como Litoral (Almería) fueron expulsadas de la subasta eléctrica al no poder competir con otras energías como la eólica, la hidráulica o el gas. En este periodo Endesa comenzó a probar otros combustibles para su planta . A sus calderas echó lodos de depuradoras mezclados con carbón, biomasa forestal u orujillo de aceituna para ver cómo respondían. Marcos Prieto, vicepresidente del comité de empresa de As Pontes, que trabaja en el laboratorio de la factoría, explicó ayer los resultados en la reunión del Ministerio. «Los trabajadores lo vemos factible, si se realiza una pequeña inversión», asegura. Prieto explica que el plan de la plantilla despertó el interés tanto de la Xunta como del Gobierno central, que se comprometió a crear «una comisión de evaluación de proyectos alternativos para la térmica de As Pontes». Los trabajadores recuerdan que en el Reino Unido ya se han reconvertido varias centrales de carbón a biomasa en los últimos años y piden la implicación de todas las administraciones. Pero temen que Endesa no esté interesada en continuar con el proyecto. En la reunión de ayer participó el consejero delegado de la eléctrica, José Bogas.

Tras la reunión, que se prolongó durante más de tres horas y media, el alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, destacó el «compromiso» adquirido por todas las partes de seguir trabajando para buscar alternativas . Sin embargo, González Formoso se mostró cauto. «Es un proceso muy complejo», aseguró. A partir de ahora habrá que comprobar si el uso de otros combustibles es viable tanto técnica como económicamente. Formoso explicó que en este punto no sólo trabajará Endesa «sino también el IDAE, el Ministerio de Industria y las Universidades gallegas, que se implicarán en el proceso para tener clara la viabilidad, con certeza, de otras alternativas de futuro para no crear falsas expectativas» . El alcalde consideró fundamental «ganar tiempo» para que Endesa pueda continuar con las pruebas y también reclamó que paralelamente se vayan poniendo en marcha mecanismos para que haya alternativas de empleo en la comarca.

Más crítica fue la postura de la Xunta, que envió a la reunión tanto al conselleiro Francisco Conde como al director xeral de Enerxía e Minas, Bernardo Tahoces. Conde censuró que el Gobierno central llegase a la mesa de trabajo sin ninguna propuesta para reactivar la actividad y garantizar el empleo en la comarca . Desde la Xunta se plantearon varias medidas. Por ejemplo la eliminación del céntimo verde, que grava a las centrales térmicas. Pero, según explican fuentes presentes en la reunión, Ribera consideró que retirar el impuesto no sería suficiente para que el coste del megavatio producido con carbón volviese a ser competitivo en el mercado.

Conde recordó que no hay tiempo y solicitó un plan específico para lograr una transición justa, «que no suponga una ruptura energética y que no se traduzca en una destrucción del tejido industrial gallego y del empleo asociado», informó la consellería en un comunicado. La Xunta pide la puesta en marcha del Plan de acción urgente de la estrategia de transición justa 2019-202, destinado a las centrales en proceso de transición y la participación de Galicia en la plataforma europea de regiones afectadas por el cierre de centrales térmicas. Además de As Pontes, que todavía no tiene fecha para la clausura, a principios de este año Naturgy anunciaba el cierre de Meirama (Cerceda).

Desde el Ministerio de Transición Ecológica no se dieron demasiadas pistas sobre qué medidas piensa poner en marcha. A través de un comunicado, el gabinete que dirige en funciones Teresa Ribera se limitó a asegurar que « abre una vía de comunicación permanente con trabajadores y vecinos para evaluar, de forma conjunta, todos los posibles escenarios de futuro , ofrecer soluciones a corto plazo y planificar acciones posteriores».

En la reunión estuvieron también representados los transportistas, que llevaban el camión desde el Puerto de Ferrol a la central. Los camioneros son la parte más débil de la cadena del empleo que genera la central y llevan meses parados y sin cobrar (la mayor parte son autónomos o pequeños empresarios). Su portavoz, Manuel Bouzas, se mostró «algo satisfecho» ya que les «prometieron algunas cosas» , aunque no quiso dar más detalles hasta comprobar si «son ciertas o no, informa Ep.