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Galicia espera la llegada de la Iacobus Maris

Existen muchos y muy diferentes caminos a Santiago, pero ninguno como esta recién estrenada ruta: la peregrinación marítima más larga de la historia que conmemora la llegada de los restos del Apóstol Santiago desde Jaffa

Las embarcaciones saliendo del puerto de Génova María Muiña

Irene Carril

Fue hace siete años cuando durante las preparaciones de la ruta marítima que conmemora el último tramo del traslado de los restos del Apóstol Santiago a Compostela, sus organizadores pensaron en completarla —la denominada Iacobus Maris—. La intención era celebrar la primera edición durante el Año Santo 2021, pero la crisis del Covid retrasó el evento hasta este verano. La singladura que comenzó el domingo pasado en Génova, y terminará en Vigo el 24 de este mes , puso rumbo ayer a Sevilla —tercer puerto de destino en el que atracará este próximo fin de semana— desde la Marina de València, donde las embarcaciones descansaron el fin de semana en la que fue la primera etapa de la ruta.

Uno de los barcos participantes en aquella travesía de 2015, el Atyla Ship, siempre tuvo claro que de realizarse durante este Xacobeo serían los primeros en participar. «Fuimos el primer barco que se unió a la ruta», relata Alfonso Garzón, jefe de operaciones del Atyla. Esta goleta es uno de los diez grandes veleros que finalmente participan en esta Iacobus Maris. Se trata de un barco de madera construido en 1984, que, convertido ahora en buque escuela, realiza viajes de aventura a nivel internacional ofreciendo una experiencia de desarrollo personal a través de actividades llenas de retos.

Los viajes a bordo de la goleta Atyla promueven actividades de aventura y coaching , apoyándose en ocho habilidades que, según comenta Garzón: «Consideramos que son esenciales para cualquier persona, y para la sociedad en general». «Intentamos generar a bordo momentos y oportunidades para reflexionar y practicarlas», añade. Algo similar sucede en cualquier peregrinación a Santiago. La experiencia del Camino, más allá de lo espiritual, ayuda a reflexionar sobre la vida y a poner en práctica ciertas capacidades. Una relación, que, para un barco como el Atyla, hace de esta ruta «una propuesta muy interesante. 'La peregrinación Xacobea más larga de la historia' —sobrenombre que se le ha dado a esta Iacobus Maris— no es algo que se realice todos los días. Además está muy en línea con lo que hacemos nosotros», reconoce el jefe del Atyla.

Ambiente en la Marina de Génova durante las jornadas de visita María Muiña

La ruta busca recrear y conmemorar la traslación de los restos del Apóstol —la 'Traslatio'— desde su ubicación original en el puerto de Jaffa , antigua provincia de Palestina. Pero «la opción de salir desde Jaffa, sobre todo en esta primera edición, se nos hacía complicado porque es una navegación de más de dos meses y en una zona conflictiva en cuanto a seguridad», comenta en conversación con ABC Celso Rodríguez, director de la Fundación Traslatio. La búsqueda de localizaciones en las que atracar los barcos se basó primero en ajustar la etapa a un mes de navegación y, segundo, en encontrar lugares históricos o relevantes. Finalmente, el lugar elegido para comenzar la travesía fue el puerto de Génova. La ciudad italiana, de gran tradición marítima, «acogió encantada participar en esta iniciativa, lo que nos dio muchas facilidades», reconoce Rodríguez. Todas las demás localidades por las que pasa la ruta —Valencia, Sevilla, Oporto y Vigo, como destino final— tienen un encanto especial.  

El enclave valenciano, uno de los más importantes y transitados de Europa, fue seleccionado por su situación geográfica y fue la primera parada de la singladura. En total, cinco son los puertos de un itinerario, dividido en cuatro etapas, en los que atracarán los barcos cada fin de semana. «Queríamos que esos días estuvieran los barcos en el puerto abiertos al público, que la gente de las ciudades pudiera disfrutarlos y las tripulaciones aprovecharan para descansar», comenta el director de la Fundación.

La segunda etapa, que arribará en Sevilla este fin de semana, permitirá a los participantes disfrutar de una ciudad y un puerto históricos. «Sevilla fue elegida por el encanto que tiene. Por eso de subir el río Guadalquivir y atracar los barcos» en el corazón de la ciudad, delante de la Torre del Oro, explica Rodríguez. La llegada a Oporto se decidió por la vecindad con Galicia y la colaboración en otras rutas marítimas. «Los barcos estarán en un sitio inmejorable» , en la zona de la Ribeira, a orillas del Douro portugués, «debajo de la zona peatonal de la ciudad».

Recrear la leyenda

La cuarta y última etapa de la ruta será el puerto olívico. «Somos de Vigo y esta tenía que ser la parte final de la ruta marítima. Luego a las tripulaciones las llevaremos a Santiago para hacer la última parte por la zona navegable del río Ulla, y recrear lo más fielmente posible la leyenda de la traslación», confirma Rodríguez a este diario. Entre las embarcaciones que participan en esta primera edición de la Iacobus Maris hay representantes de cuatro países . «Este año participan barcos de las Armadas italiana, rumana, francesa y española», detalla Rodríguez, «por lo que podemos decir que tenemos la representación de un país en cada puerto». Tras esta primera etapa, se unía también a la ruta el buque escuela de la marina italiana, Palinuro, que partía desde Valencia con el resto de embarcaciones.

La primera etapa de la ruta que partió desde Génova el pasado 24 de junio tuvo una gran acogida, con más de 20.000 personas que se acercaron a visitar los barcos y goletas , y dejó encantados tanto a las tripulaciones como a los organizadores. Su llegada a la Marina de València, este pasado fin de semana, acercaba a miles de visitantes a las embarcaciones y la experiencia de una ruta que ha vivido ya una pequeña tormenta de verano, con olas de cinco metros, algo de lluvia y fuertes vientos. «La respuesta del público fue espectacular, los barcos estuvieron llenos todo el fin de semana», narra Celso Rodríguez. Para las dos etapas restantes la organización confía en que se logre una afluencia de público similar a la vivida en las primeras.

Tras la ruta turística por el centro histórico de la capital del Turia, y sellar la credencial del peregrino a todos los participantes, las tripulaciones soltaban de nuevo amarras este domingo poniendo rumbo al puerto de Sevilla. A la espera de que el remate de la ruta en Vigo, el próximo 24 de julio, confirme el éxito de una travesía que nace para celebrarse cada Xacobeo —conmemorando así la peregrinación original desde Tierra Santa hasta Galicia que la leyenda atribuye al Apóstol— , Rodríguez se muestra optimista y confía en volver a surcar los mares el próximo Año Santo, consolidando así este itinerario.

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