Los Franco ofrecen a la RAE la donación de la biblioteca de Pardo Bazán que está en Meirás

La decisión de los Franco viene motivada por una doble vía: por un lado, el desinterés para asumir la biblioteca, que exige de unas condiciones de conservación difíciles de garantizar en un domicilio particular, toda vez que el fondo va a ser declarado BIC por la Xunta de Galicia en los próximos meses, con lo que ello implica a la hora de elevar los requisitos de preservación. Por otro, la profunda desafección de la familia con las distintas administraciones públicas que han participado en el proceso judicial de reclamación del Pazo de Meirás, al entender que contra ellos y su madre se han vertido determinadas acusaciones y atribución de intenciones ofensivas. Lo que podría haber sido un entendimiento entre los Franco y la Xunta o el Estado para donar la biblioteca ha derivado en un abierto rechazo a esta posibilidad . De ahí que la familia explorase otras vías para entregar la biblioteca, que según las fuentes consultadas «pasaría en todo caso por una fundación privada».

De ahí surgió la posibilidad de que se le ofreciera la donación a la RAE. El primer contacto se hace con un académico, que a su vez traslada la propuesta al director de la institución, Santiago Muñoz Machado. Pasados unos días, este mantiene un encuentro con un representante de la familia, donde traslada su «buena receptividad» a la oferta , que enriquecería notablemente el patrimonio bibliográfico de la Academia. Sin embargo, Muñoz Machado hace saber que la aceptación o no deberá tratarse en el plenario.

Entre los académicos, en la sesión mantenida el pasado jueves, las opiniones están encontradas. Las citadas fuentes hablan de que algunos se muestra «reacios» , principalmente por entender que sobre la biblioteca de Pardo Bazán puede haber, en un futuro, problemas legales respecto a su titularidad, dado el proceso abierto sobre la propiedad de los bienes del interior del Pazo de Meirás. Este representante de la familia trasladó en su día a Muñoz Machado que la biblioteca es propiedad de los Franco, ya que su abuelo la recibió en donación directa de Manuela Esteban Collantes, la nuera de doña Emilia, en 1938 .

La familia espera respuesta . Y, según aseguran fuentes próximas, tiene claro que en la donación se incorporará una «cláusula de reversión» para que el fondo regrese a los Franco si la institución o fundación donde se deposite intenta a su vez entregárselo a los poderes públicos.