Feijóo anuncia su comparencia en el Parlamento en una bronca sesión de control

La Xunta defiende su gestión. Antes, durante y después. Antes, desmintiendo el despido de 436 brigadistas en los días previos al fatífico domingo Al contrario, la administración prorrogó todos los contratos extinguidos a partir del pasado 9 de octubre. «No es razonable decir que el problema fue una falta de medios, nunca hubo tantos en octubre», ha aseverado Feijóo a preguntas de Ana Pontón (BNG), que ha reclamado la creación de la comisión «especial» de estudio sobre las causas del fuego. Durante, con la presencia del jefe del Gobierno gallego en los centros de coordinación de emergencias y su contacto con los principales líderes de los partidos. Entre ellos, Luís Villares y Pablo Iglesias . El después se concretará mañana, cuando el Consello dé luz verde a las ayudas directas para la reconstrucción de las viviendas habituales calcinadas.

Fue el propio Feijóo quien ha desvelado las llamadas a la oposición, después de que el portavoz rupturista le cuestionara por sus movimientos mientras ardían los montes y denunciara que la Xunta «no estuvo a la altura de la circunstancias». «Usted y yo hablamos y que me diga dónde estuve el domingo me parece indigno» , ha respondido el presidente, que intentó igualmente contactar con Pontón y Leiceaga a la una de la madrugada, aunque sin éxito.

El otro punto de los puntos candentes del pleno estuvo en la gestión de los tiempos por parte del presidente del Parlamento, Miguel Santalices. Con el orden del día cerrado, Santalices solo ha concedido margen a Pontón (que coqueteó con la expulsión) para formular su pregunta sobre los incendios . Un «error», como ha confesado posteriormente, que no estuvo dispuesto a repetir con el líder de En Marea. Con los socialistas no fue necesario, pues su portavoz Leiceaga ha centrado su intervención en el saneamiento de las rías y solo ha solicitado la celebración de un pleno extraordinario sobre la cuestión incendiaria.