Ence proyecta en As Pontes una planta complementaria a la celulosa de Pontevedra
Quiere instalar una fábrica de papel tisú y biomateriales en los terrrenos de la central térmica
A la espera de que, tras el recurso, el Tribunal Supremo dictamine si puede mantener la planta celulosa de Pontevedra, Ence proyecta nuevas inversiones en Galicia. La compañía nunca se ha planteado desmantelar la planta de Lourizán para trasladarla a otro emplazamiento en la Comunidad, pero esta mañana avanzó que estudia instalar una nueva factoría de biomateriales y papel tisú. Según explica la compañía en una nota de prensa, el emplazamiento elegido será la localidad coruñesa de As Pontes . La nueva planta aspira a instalarse en los terrenos que dejará libre la central térmica de Endesa, que está tramitando el cierre. La factoría de Ence podría beneficiarse de las ayudas públicas previstas para las zonas denominadas de transición justa, en las que se abandona el carbón.
El consejo de administración de Ence trasladó la noticia a la Xunta. «Iniciamos oficialmente los estudios para un proyecto novedoso en Galicia. Hemos elegido As Pontes, donde está actualmente la térmica, para iniciar el estudio y el desarrollo de una planta de biomateriales que va a ser muy novedosa para Europa y para nosotros, ya que va a ser el primer proyecto que no va a utilizar madera como materia prima», explicó el presidente de Ence, Ignacio Colmenares. La planta se destinaría a la recuperación de papel y de cartón que produciría fibras, con la posibilidad de incluir en el proceso fibra virgen proveniente de la factoría de Pontevedra y eso, añadió, «se acabaría en papel tisú mixto, recuperado y virgen». La factoría no sería una planta de celusosa como la de Pontevedra, sino que producirá fibras naturales recicladas , con un consumo de recursos naturales (agua, subproductos agroforestales, etc.), capacidad y dimensiones muy inferiores a la de Lourizán. «Se trata de un centro de trabajo independiente con una actividad autónoma y diferenciada», subraya Ence. Colmenares insistió en que es un proyecto «complementario» a Lourizán y «no alternativo». La propia ministra de Transición Ecológica había animado a Ence a trasladar la celulosa a As Pontes tras las sentencias de la Audiencia Nacional, que consideran que no puede seguir en la ría de Pontevedra.
Según las primeras estimaciones, la inversión en la nueva planta sería de entre 330 y 350 millones de euros . Ence calculan unos 125 millones para la planta de fibra recuperada y unos 60 para la planta de papel tisú. Además, Ence considera que podrían generarse 150 empleos directos, otros 400 relacionados con empresas de mantenimiento o transportes y «algo más de 1.000 » empleos indirectos.
El proyecto se llevará a cabo una vez que se confirme la viabilidad «técnica, financiera y económica». Según explicó Colmenares, tendrán que empezar a solicitar cuestiones como el punto de conexión del agua o de conexión eléctrica y se deberán transformar los terrenos en industriales. En todo caso, el presidente de Ence calcula que el estudio lleve «un mínimo de 12 meses» y señaló que el objetivo es empezar a construir «a mediados o finales del año que viene».
Compromiso de la Xunta
El consejo de administración de Ence se reunió en San Caetano con el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y con el vicepresidente primero y conselleiro de Economía, Industria e Innovación, Francisco Conde. El vicepresidente mostró el «compromiso» de la Xunta con este proyecto y agradeció a Ence la iniciativa. «El compromiso de Ence con Galicia es un compromiso de muchos años y que hoy es refrendado, no solo por su ubicación en Lourizán, sino por la decisión de evaluar la posibilidad de desarrollar un nuevo proyecto en Galicia», manifestó Conde, informa Ep.
En esta misma línea, Conde aseguró que la administración autonómica acompañará a Ence en sus necesidades para evaluar la viabilidad técnica, ambiental, financiera y económica de este nuevo proyecto. Conde agradeció también la «apuesta» de Ence por mantener la ubicación de la planta de Pontevedra y destacó la «unidad de acción» de la empresa y de la Xunta, además de «los trabajadores, la industria auxiliar, la industria logística, de transporte y de la Autoridad Portuaria de Marín» para que «Ence pueda continuar su actividad en Lourizán».
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