Feijóo emplaza a Ciudadanos a rebajar sus pretensiones antes del 1 de marzo

Pablo Pazos

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17/02/2020
Actualizado a las 21:05h.

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Ciudadanos tiene hasta el 1 de marzo para abandonar su postura, enrocada en reclamar a Alberto Núñez Feijóo que se pliegue a la fórmula de la coalición para concurrir en las elecciones autonómicas del 5 de abril. El plazo no es nuevo: ese día se cierran las candidaturas. Pero Feijóo, de alguna forma, trazó este lunes una raya después de semanas de presión desde la formación naranja, que se han topado con una respuesta invariable por parte del líder del PPdeG y del resto del partido: no a una coalición, no a disolver las siglas de la primera fuerza de Galicia, sí a hacer hueco a dirigentes de la formación naranja. El mismo planteamiento del primer día, el que no ha desplazado ni un milímetro. El que reiteró por la mañana desde la localidad lucense de Cervo, donde una vez más, y ya se ha perdido la cuenta de las veces que lo ha proclamado, volvió a «abrir de par en par una organización transversal», como es el PPdeG, «a cualquier dirigente de Ciudadanos que se quiera sumar. Ese es el proyecto que vamos a mantener no en los próximos días, sino hasta que se cierren las listas electorales el 1 de marzo », acotó su oferta.

Feijóo, en declaraciones a los medios, quiso nuevamente marcar distancias con la agenda de Ciudadanos, en absoluto coincidente con la suya. Por eso reclamó « distinguir la estrategia del Congreso de Ciudadanos del 15 de marzo de la estrategia de las elecciones gallegas ». Y fue más allá cuando proclamó: «Pido para Galicia un respeto». Leído entre líneas: no le gusta a Feijóo que la Comunidad aparezca como una moneda de cambio arrojada por Cs en su diálogo con el PP para amarrar acuerdos también en País Vasco y Cataluña, donde los populares sí ven con buenos ojos la fórmula de las coaliciones. El líder del PPdeG advirtió que no piensa entrar en lo que considera «tácticas, técnicas y estrategias» por parte de Ciudadanos ante el congreso del que saldrá su nuevo o nueva líder. Ahí enmarca la insistencia en coaligarse en Galicia el 5-A (el plazo concluye este jueves). «A los gallegos no nos interesan los congresos de otros partidos políticos, ahora estamos en precampaña electoral, nos interesan nuestros proyectos», puso un nuevo muro ante los planes de la formación naranja.

Esto no impide, nunca lo ha hecho, que siga tendida la mano a dirigentes de Cs con el ánimo de «sumar», pero nunca como subterfugio para «entrar en disquisiciones internas» del partido que actualmente se encuentra sin liderazgo oficial tras la marcha de Albert Rivera. Una puerta que, en cambio, no está abierta para Vox, dado que sus dirigentes, cuando acuden a Galicia, advierten «claramente de que su objetivo fundamental es echar a Feijóo de la Xunta», recordó el presidente. Así, «con aquellos que nos quieren echar es imposible pactar». Es más: Vox se sitúa en el mismo ámbito que la izquierda gallega al compartir «objetivo». El candidato a la relección se permitió una broma al comentar que su partido es la «mejor opción» o, en su defecto, «la opción menos mala».

El tira y afloja orquestado por Ciudadanos se coló en el comité de dirección que encabezó Feijóo ya por la tarde en Santiago. Su número dos, Miguel Tellado, salió al paso de la llamada que, ahora sí, aseguraron ayer desde la formación naranja que se efectuaría a corto plazo a la sede gallega del PP. Su secretario general se ciñó a la norma habitual de no dar publicidad a lo que deberían ser contactos discretos: «No tiene sentido radiar y comentar los contactos que pueda haber entre partidos », zanjó. Eso sí, tras recordar que «el PP es el gran proyecto de Galicia, un proyecto al servicio de Galicia y no al servicio de las siglas. Nuestras siglas son Galicia. Hay que hablar menos de los partidos y mucho más de Galicia». Una vez más, «puertas abiertas», y el recordatorio de que el PP gallego ha «demostrado a lo largo de los últimos 11 años ser el principal antídoto para impedir el crecimiento del nacionalismo», uno de los argumentos con los que Cs trata de forzar la coalición. Con menos del 2% de estimación de voto según el barómetro de ABC/GAD3, esa idea carece del respaldo de los números.

El PPdeG, mientras, sigue a lo suyo. Preparando ya la campaña que arrancará en poco más de un mes, en la que se buscará ilusionar a un electorado hastiado de tanto comicio, ofreciendo una apuesta por una Galicia «unida» y no «fragmentada» como busca la oposición, explicó Tellado. Eso sí, las listas, para más adelante: « Aún no abrimos el proceso de elaboración de candidaturas ». De nombres (Pablo Casado, Mariano Rajoy) aún se comenzó a hablar ayer, pero habrá refuerzos: «Aquí no sobran manos. Todas las manos que se quieran sumar son siempre bienvenidas».