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Casado promete liberar de impuestos los planes privados de ahorro sin tocar las pensiones públicas
El líder popular defiende el discurso único del partido y recuerda que quienes ven tensiones, «pinchan en hueso»
Mario Nespereira
El presidente nacional del PP, Pablo Casado, ha prometido este sábado un «blindaje fiscal» al ahorro en caso de gobernar tras las elecciones generales del 28 de abril. Presente en Ferrol en una convención de política social organizada por el partido, el popular ... ha explicado una batería de propuestas encaminadas a incentivar el ahorro privado. En ese sentido, el PP planteará liberar de impuestos los planes de pensiones o los planes de ahorro en el momento de su rescate y nuevas bonificaciones para la compra de vivienda habitual. «Claro que esto tiene un coste económico», ha confesado el dirigente popular, «pero, ¿y el beneficio para una persona de clase media y trabajadora que está pagando una vivienda habitual, no solo con el objetivo de no pagar un alquiler, sino también para que sus hijos puedan disfrutarlo?».
Con esta medida, el PP también persigue abrir el ahorro para complementar la jubilación sin que llegue a afectar a su pensión pública o a los «beneficios fiscales» que ya se encuentran en marcha . Con ello, los españoles estarían exentos de pagar cualquier gravamen en el momento de querer acceder a los planes de pensiones o de ahorro que fueron nutriendo con el paso de los años, y conseguir así que Hacienda no lastre «el haberse esforzado» durante toda una vida.
En el partido, además, ejemplifican las ventajas en una pareja en la que cada uno gana 20.000 euros al año y que carga con una hipoteca de 758 euros mensuales. En su caso, los beneficios fiscales podrían favorecer un ahorro de 2.000 euros al año . La medida se suma a otras desgranadas en el pasado por el propio Casado, como la supresión del impuesto de Sucesiones, Sociedades o Actos Jurídicos Documentados.
Un discurso único
Al margen de las pensiones y los beneficios fiscales, Casado ha reivindicado la cohesión y la unidad de discurso dentro de su partido en plena carrera preelectoral, por mucho que se intente «poner la lupa» en los matices. «La prensa está muy inquieta por intentar ver diferencias entre el PP de un lugar y otro. Les quiero mandar un mensaje muy nítido: pinchan en hueso», ha zanjado, la misma semana en que planteó una reforma lingüística para prohibir que las lenguas cooficiales sean un requisito para acceder a un puesto en las administraciones.
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