La Aemet pronostica un otoño más caluroso tras un verano seco

Este «déficit» de precipitaciones prolongado provoca que la Comunidad acumule ya una escasez del 30% de lluvia . Según expuso Infante, en este año hidrológico —desde octubre a septiembre— Galicia únicamente ha registrado una cantidad de precipitaciones que corresponde al 65% de las que debería haber en ese periodo. Las zonas de A Mariña lucense y el interior de la provincia de Orense, señaló, han sido las únicas áreas con cifras normales de precipitación «debido a la actividad tormentosa». Sin embargo, en lo que respecta a tormentas, Infante detalló que no se trató de un periodo «especialmente tormentoso», con catorce días con esta actividad frente a los veinte habituales, concentrados en esta ocasión a mediados de junio, entre el 4 y el 8 de julio y entre el 26 y el 29 de agosto .

A pesar de que el verano fue seco, señaló el delegado en Galicia de la Aemet, «hubo bastantes días con nubosidad o con alguna precipitación muy débil», por lo que está por encima de la media en días con lluvia. Esto influye en el nivel de sequía, que se mantiene en Galicia. Esta situación tan complicada podría solventarse de aquí a enero «si lloviese lo normal hasta final de año», recalcó Infante. Pese a esto, la Aemet espera una mayor número de lluvias en los meses de noviembre y diciembre, aunque la «escasez» se mantenga en octubre .

Tras un verano «muy cálido» en Galicia, sobre todo durante los meses de junio y julio, superando los 40 grados en algunos puntos de la provincia de Orense, la Aemet espera que el otoño sea «algo más cálido» de lo habitual . En este próximo trimestre será fácil que las temperaturas estén por encima de los valores medios.

Los datos del verano sitúan a junio como el mes más cálido , con una máxima absoluta en Ribadavia (Orense) de 41 grados centígrados y la mínima más alta en Pazos de Borbén (Pontevedra), donde el 19 de junio el termómetro no bajó de los veintitrés grados. A pesar de tener los tres últimos días fríos, junio fue «un mes muy cálido, en especial entre los días 14 y 23, que coincidieron con primera gran ola de calor en España».