La fundación de Aznar eleva el tono contra Vox: «Es el seguro de vida del sanchismo»

También asegura que en esta formación son «malos conservadores». Así lo punta FAES en un análisis divulgado ayer, titulado ‘Vox y la corrupción del conservadurismo’, que supone un punto de inflexión en las opiniones de este ‘think tank’ sobre el partido situado a la derecha del PP. Hace años que la fundación de José María Aznar no está vinculada a los populares, pero mantiene muchos puntos de afinidad con el partido liderado por Alberto Núñez Feijóo.

FAES señaló en ese documento al presidente estadounidense Donald Trump y a sus simpatizantes como un agente corrosivo que ha terminado por destruir el significado del Partido Conservador norteamericano, si bien el propio magnate neoyorkino ya había avisado en su día de que «esto es el Partido Republicano, no es el Partido Conservador». Por esta misma razón, FAES afea a los de Abascal por abrazarse al trumpismo y apuntarse a su lógica «antisistema y rupturista» precisamente en el momento en que Trump defendió que el presidente ruso, Vladimir Putin, podía actuar contra «cualquier miembro de la OTAN que él considere incumplidor». «Sus declaraciones las hacía de la forma más temeraria y peligrosa, en el peor momento, mientras el expansionismo ruso amenaza los equilibrios geoestratégicos y la propia seguridad de Europa y, por tanto, la de España», considera la entidad que dirige el también expresidente del PP.

Además, afirma que la sintonía política de Abascal con Trump es prueba de que entre el proyecto español y el conservadurismo hay un abismo, tacha a Vox de populista y recuerda que nació para suplantar al PP: «En lo ideológico, su proximidad con modelos populistas aleja su proyecto del concurso de mayorías suficientes. En lo electoral, su rendimiento se limita a dificultar la posibilidad de una alternativa al sanchismo».

Estas calificaciones llegan en plena campaña de las europeas y tras las polémicas declaraciones del presidente de Argentina, Javier Milei, sobre la esposa del español, Pedro Sánchez, en el Viva24 de Vox, que FAES tilda de «cónclave ‘conservador’ que Vox festeja anualmente para darse una publicidad que el Gobierno siempre ‘aviva’». Considera que Vox se busca socios de manera electoralista: «Por la pasarela voxista ha desfilado toda la ‘derecha alternativa’ europea: Le Pen, Orban… con énfasis distintos en función de las urgencias electorales de Vox en cada coyuntura: ‘antisistema’ o ‘respetable’ según donde apunte la brújula demoscópica».

Esta fundación retrata a Vox como un obstáculo electoral para el PP en las generales del año pasado, en las que cree que el partido de Abascal «favoreció claramente la estrategia de movilización socialista. No ahorró gestos ni exhibiciones histriónicas para que el discurso de Sánchez encontrara destinatarios receptivos a pesar de todo. Vox sirvió, a la postre, para inutilizar la victoria popular». Y le acusa de «denostar las instituciones», una actitud que, según FAES, no puede mantener ninguna formación que aspire a llamarse «conservadora». Y concluye: «Vox dice querer ser parte de la alternativa que Vox contribuye a sabotear. Al final, queda más que acreditado que Vox y Sánchez se retroalimentan actuando como polos complementarios».