Arde la vivienda de una de las familias involucradas en el tiroteo de Plasencia

No es un episodio aislado. En los últimos días, se han producido varios conatos de incendio, no solo en viviendas, sino también en vehículos. Desde un primer momento, tras lo sucedido, en el municipio temían que hubiese represalias y que el conflicto escalase.

Cierto es que la enorme presencia policial en la barriada ha servido para controlar la crispación y evitar, por el momento, otra tragedia, pero los vecinos temen que, tarde o temprano, haya un ajuste de cuentas.

Frente al clima de inseguridad que viven en las últimas horas los vecinos de Plasencia, un centenar de comerciantes de la ciudad se han concentrado en la Plaza Mayor de la capital del Jerte para exigir una mayor presencia policial en la zona.

Entienden que no es un hecho aislado y denuncian que, ya en los últimos meses, había crecido el número de robos y, por ende, la sensación de inseguridad no ya solo en los negocios, sino también para los propios vecinos. En este sentido, el sindicato policial JUPOL denunció que, cuando se produjo el tiroteo, solo tres policías estaban patrullando en la ciudad.

Los comerciantes entienden que esta situación podría desincentivar la llegada de turistas y piden a las administraciones una respuesta inmediata.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Plasencia decretó prisión provisional y sin fianza para seis de los nueve detenidos tras el mortal tiroteo. El resto ha quedado en libertad, pero con la obligación de comparecer en los juzgados los días 1 y 15 de cada mes.

Se han abierto diligencias por un posible delitos de homicidio, homicidio en grado de tentativa, lesiones, riña tumultuaria y tenencia ilícita de armas.