Dentistas españoles en alerta por el auge del turismo dental en Marruecos: «Es una mezcla explosiva»
El presidente del Consejo General de Dentistas de España explica a ABC los detalles de esta moda que seduce en España, pero que puede llegar a tener graves efectos sobre la salud
Marruecos rechaza la petición de recibir asistencia médica de la feminista encarcelada por una camiseta que decía «Alá es lesbiana»
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión«¡Transforma tu sonrisa con carillas de resina de composite en Marrakech por solo 1.250 euros por persona o 2.000 para dos personas!» Este es uno de los muchos reclamos que circulan en TikTok, acompañado de vídeos en los que pacientes españoles ... muestran su flamante dentadura frente a la cámara, relajándose junto a una piscina y asegurando que su viaje a Marruecos ha sido un éxito rotundo.
@dentifly ¿Qué incluye el pack ? •Tratamiento completo de carillas •Vuelos de ida y vuelta •Alojamiento •Desayuno, comida y cena •Recogida en el aeropuerto y acompañamiento durante todo el proceso •Transporte •Actividades en Marrakech ¡Mensajes o llamadas de WhatsApp al +34 617 06 14 89!☺️
♬ sonido original - dentifly
Soluciones rápidas y económicas que están atrayendo a cada vez más turistas españoles. Basta con enviar una foto de la boca a la empresa organizadora, recibir un diagnóstico remoto y reservar el paquete. Por precios que oscilan entre los 650 y los 2.000 euros por 20 carillas, se promete una sonrisa de cine con una durabilidad de entre 10 y 15 años. El paquete incluye vuelos, alojamiento en hotel, excursiones en quads o camellos por el desierto, guías, chófer privado… y una visita exprés al dentista en Rabat o Marrakech.
Con un marketing agresivo y tarifas muy competitivas, las clínicas marroquíes están ganando popularidad entre los pacientes europeos. Sin embargo, desde el sector dental español han saltado las alarmas.
-
La CIA modificó su mapa de Marruecos con un detalle que tiene que ver con España
Alexia Columba Jerez
Una práctica «temeraria»
El presidente del Consejo General de Dentistas de España, Óscar Castro Reino, lo resume a ABC sin rodeos: «Lo barato sale caro. Unir ocio con salud es una mezcla explosiva y una temeridad. El procedimiento está destinado casi al fracaso». Castro advierte que muchos de estos tratamientos se realizan en cuestión de horas, sin margen para una evaluación bucodental completa ni una planificación personalizada o un seguimiento.
Estas prácticas han provocado muertes por uso de anestésicos falsificados o caducados, sobredosis administradas al azar, discapacidades permanentes o infecciones por condiciones de higiene deplorables»
Orden Nacional de Médicos Dentistas de Marruecos
«Todo tratamiento conlleva unos riesgos, y si no se evalúa correctamente el estado de cada paciente, pueden surgir complicaciones a corto y largo plazo: sensibilidad dental, problemas en las encías e incluso pérdida de piezas dentales cuanto menos». Además, critica la ausencia de garantías. Y estos escenarios pueden ir a más.
Advertencia desde Rabat: prácticas ilegales al alza
Desde la propia Orden Nacional de Médicos Dentistas de Marruecos (ONMD) también se ha lanzado una señal de advertencia. En un comunicado oficial del 16 de junio, la institución denunció el auge de prácticas odontológicas ilegales y sin control: «Estas prácticas han provocado incidentes dramáticos, ampliamente difundidos por los medios y documentados por los tribunales: muertes por uso de anestésicos falsificados o caducados, sobredosis administradas al azar, discapacidades permanentes o infecciones adquiridas en condiciones de higiene deplorables». La ONMD advierte que muchos de estos procedimientos son llevados a cabo por personas sin formación ni autorización legal, en locales que no cumplen normas mínimas de higiene. Denuncian especialmente el papel de talleres clandestinos disfrazados de «fabricantes de prótesis dentales», donde se ejercen actos reservados a dentistas colegiados.
A pesar de los esfuerzos del Ministerio del Interior y las inspecciones, la ONMD constata que estas clínicas ilegales proliferan incluso en zonas urbanas conocidas. «Una amenaza para la salud pública y también para la imagen de Marruecos», subrayan. «El Reino se prepara para acoger eventos turísticos y deportivos internacionales. Por tanto, es esencial reforzar la vigilancia sanitaria y evitar que estas prácticas pongan en riesgo la reputación del país».
Rabat responde a las críticas de España
Las declaraciones del Dr. Castro han llegado a los medios marroquíes, donde el presidente de la ONMD, Mohamed Sdira, ha salido al paso. En entrevista con Médias24, defiende la calidad de los profesionales locales: «Si hay pacientes que vienen de España, Francia u otros lugares, es porque somos competentes y nuestras tarifas son más económicas que en Europa». Sdira enmarca el fenómeno en un contexto global: «Marruecos no hace más que sumarse a una tendencia internacional. Miles de personas viajan cada año para recibir atención médica, especialmente dental. Esto no es exclusivo de Marruecos».
Sin embargo, también lanza una observación sobre los dentistas españoles y los medios señalan que hace referencia a una falta de reciprocidad: «Cuando un paciente regresa a España con carillas colocadas aquí y surgen complicaciones, los dentistas locales a menudo se niegan a intervenir, incluso si es algo sencillo. Nosotros, en cambio, sí atendemos a los marroquíes que regresan de tratamientos en el extranjero».
Castro rechaza la idea de una disputa entre países. «Esto no va de nacionalidades, va de salud», subraya. Y añade que, en España, incluso los marroquíes en situación irregular tienen derecho a atención dental gratuita en el sistema público. «Como sanitarios, no podemos denegar el auxilio. Cuando se trata de salud, intervenimos. Si es una cuestión estética, ya entra en juego el criterio del dentista». Pero lanza una advertencia clara: «Con la salud no se juega.
«Si se hiciera una ampliación de la parte de servicios y, por supuesto del contrato de personal, así se solucionarían muchas de las cosas que encontramos. Y al final, los más vulnerables —quienes menos recursos tienen— son los que acaban pagando el pato. Y estoy harto de verlo, porque soy dentista público, y somos apenas 1.200 dentistas para una población de 48 millones de habitantes», comenta Castro.
De Turquía a Marruecos, pasando por China
El fenómeno del turismo sanitario no es nuevo. Turquía fue una de las pioneras con el conocido 'Turkey Teeth', donde agencias organizaban paquetes completos: vuelo, hotel, turismo y tratamientos dentales. «Te recogían en el aeropuerto, te enseñaban la ciudad, te ponían los dientes, y si querías, hasta una liposucción o una operación de pecho», recuerda Castro. Las consecuencias, dice, fueron desastrosas. En Mallorca, numerosos dentistas atendieron a pacientes con serios daños bucales: «No era que les dejaran los dientes feos, es que se los destrozaban».
También en Europa del Este y Asia Central se ha popularizado este tipo de turismo médico. En Rusia, por ejemplo, muchos ciudadanos viajaban desde Vladivostok a la ciudad china de Hunchun, y desde Blagovéshchensk, a Heihe para recibir atención dental barata. El medio 'People of Baikal' relata el caso de Igor, un exempresario que ha viajado por Asia durante los últimos tres años, comenta: «Me sacaron todo. Resultó que ya estaba cubierto de sangre. Me llevaron a la oficina y empezaron a enseñarme fotos con precios que ya no coincidían con los que habíamos acordado«. Y añade: «El médico jefe anotó los precios en un papel y dijo: 'Mira, te sacaron nueve muelas'. Le dije: '¿Cómo que nueve? ¡Acordamos cinco!'», añade.
Una tensión en aumento
A medida que más ciudadanos europeos exploran opciones sanitarias fuera de sus fronteras, los profesionales nacionales expresan su preocupación por la seguridad de los pacientes y la desprotección legal en caso de complicaciones.
La polémica entre los colegios de odontólogos de España y Marruecos es solo un capítulo más en el creciente fenómeno del turismo sanitario globalizado. Un fenómeno que plantea preguntas incómodas: ¿se puede garantizar calidad a bajo coste? ¿Quién protege al paciente cuando la clínica está al otro lado del mar? ¿Y hasta qué punto las redes sociales deberían poder promover tratamientos médicos como si fueran una oferta de agencia de viajes?
Por ahora, miles de personas siguen volando a Marruecos en busca de una sonrisa perfecta. A veces, sin saber si lo que se llevan de vuelta a casa es una ganga… o una bomba de tiempo.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete