David Alandete defiende la labor de la prensa en el Congreso frente a «políticos que desprestigian periodistas y jueces»: «Se parecen a Trump»

El periodista, que también colabora con la Cope, ha comenzado su intervención con una desarrollada explicación acerca de ambos temas. En primer lugar, ha explicado como el contrato con Huawei a través del Ministerio del Interior para la gestión y almacenamiento de datos sensibles, como las escuchas telefónicas judiciales, ha causado polémica internacionalmente. Según ha comentado, en los Estados Unidos consideran esta relación como un «riesgo político, estratégico y de dependencia». Además, varios senadores estadounidenses consideran que siendo España un socio de la OTAN, «sorprende que se firme este contrato» y que no se haya dado prioridad a productos norteamericanos o de compañeros de la OTAN. «Huawei, como muchas de las tácticas de las empresas chinas, copia patentes y las ofrece a un precio barato por medio de unos servicios que llevan una relación de obediencia debida con el gobierno de su país», ha comentado Alandete, recordando que ya esto es un «riesgo de fiabilidad de España en la OTAN». Ha querido recordar que existen dos investigaciones abiertas en EE.UU. acerca de este tema, «una por parte de la directora de Inteligencia Nacional y otra por el Departamento de Comercio».

Acerca de la injerencia rusa en el proceso independentista catalán de 2017, explicada en su libro 'La Trama Rusa', Alandete ha incidido en la enorme cantidad de pruebas que relacionan a Rusia con Carles Puigdemont: desde la publicación de datos sensibles acerca de la presión rusa en Wikileaks hasta la existencia de libretas pertenecientes a Víctor Terradellas, empresario catalán fallecido a finales de agosto de este año que estuvo involucrado con la internalización del 'procés', y Josep Lluís Alay, jefe de la oficina de Puigdemont, en las que se observa la relación con Rusia y altos cargos del Gobierno de Vladimir Putin. El presidente ruso, según ha confirmado Alandete, conocía la situación en Cataluña y vinculó los casos de España y Ucrania en un sonado discurso sobre el separatismo y otros desafíos al orden mundial. Ocurrió el 19 de octubre en el foro Valdai, una reunión anual de académicos y políticos celebrada en la ciudad de Sochi, vendida como un «foro eslavo de Davos».

Alandete ha recordado también una de las piezas claves de la relación entre Moscú y Barcelona: la presencia de la Unidad 29155 del GRU (la agencia de inteligencia militar de las Fuerzas Armadas de Rusia) en Cataluña durante el proceso independentista de 2017. Esta sección de militares está especializada en «sabotaje, envenenamiento y acciones encubiertas en Europa». Además, todo ello sucedió durante una «campaña de desinformación» organizada por Rusia en la que se compartió que «que hubo tanques en las calles de Barcelona o mas de mil heridos por las cargas policiales».

Tras una primera explicación general, los distintos parlamentarios disponían de un turno de palabra para exponer sus preguntas al periodista de ABC. Desde el PP, Rafael Hernando, acerca de los contratos de Huawei, ha confirmado que los «lobbies chinos han funcionado» y han conseguido hacer que la amenaza china desaparezca del Informe de Seguridad de 2025 y que el Gobierno, mediante Óscar López, considere estas preocupaciones de «inventada». Por parte del PSOE, Javier Rodríguez, ha acusado a los populares de instrumentalizar la comisión e invitar a Alandete con fines partidistas. Además, ha criticado que aún se esté investigando el 'procés' en 2025 ya que «la justicia ha dicho que no» y el periodista ha aprovechado esto para «hacer un libro que no es cierto, una novela histórica». Los demás socios de investidura han continuado la línea de los socialistas y han acusado a Alandete de «acudir a fantasmas internos», de fomentar una «campaña de desinformación» y de realizar su labor en ABC y Cope, «medios de comunicación claramente alineados contra el independentismo». Junts, por su parte, ha acusado al periodista de formar parte de una operación política y de «deslegitimar el independentismo y legitimar la violencia». Además, durante un discurso en contra de la desinformación y los bulos, el diputado independentista ha declarado que el Parlamento Británico, mediante un informe, desmintió las informaciones de Alandete sobre la injerencia rusa, una información que no es verdadera ya que este fue solo un comentario incluido en el informe, no la conclusión de la cámara. En el momento de máxima tensión de la comisión, el diputado ha acusado directamente de «mentiroso» y de «no tener oídos».

Tras ello, Alandete ha podido contestar a cada uno de los senadores. En un primer momento, ha pedido respeto por las actuaciones de los periodistas y ha afirmado que nunca imaginaría «ser insultado en sede parlamentaria por un diputado», en alusión a los comentarios del diputado de Junts. Acerca de los ataques hacia el periodismo, el corresponsal ha criticado que insulten la labor de los profesionales de la comunicación y ha afirmado que es una situación que no se ve «ni en Turquía». «Están desprestigiando a los periodistas y a los jefes. Se parecen a Trump, lo hace a diario. Es alarmante», ha sentenciado. Ha recordado que su trabajo es ser, simplemente, un mero «mensajero» y que las conclusiones las deben tomar los parlamentarios, aunque ha advertido que «matar al mensajero es una mala estrategia en democracia».

En una segunda ronda de preguntas de los diputados y senadores, los populares han agradecido el trabajo de Alandete y le han felicitado por sus varios logros conseguidos como el Premio al Mejor Corresponsal Español concedido por la Asociación de Corresponsales de Prensa Extranjera (ACPE), el Club Internacional de Prensa (CIP), la Asociación de Periodistas y Escritores Árabes en España (APEAE) y la Asociación de Prensa Africana (APA). Además, le han solicitado que «no se deje amendentrar y siga preguntando que eso es lo que tienen que hacer los periodistas». El diputado de Vox, en su caso, ha lamentado la polarización sufrida en la comisión y ha agradecido la comparecencia del corresponsal. Por parte del PSOE, Sumar, Junts, ERC y Bildu, han continuado con el mismo discurso que en su primer turno de palabra. Los socialistas han acusado al periodista de «victimizarse» tras pedir respeto por su trabajo, desde Sumar han acusado a ABC y Cope de extender su línea editorial «hasta el portero» del edificio, Junts ha repetido que el corresponsal «viene a contaminar», ERC le ha acusado de ser un «especialista en 'fake news'» y Bildu le ha considerado un «actor político» contra el independentismo.

Finalmente, Alandete ha exigido respeto para sus compañeros de ABC y Cope, que en muchos casos han sido «amenazados por ETA, desplegados en zonas de guerra... y en muchas ocasiones con el poder en contra». «Pueden insultarme, pero tengan un respeto por esas cabeceras», ha declarado, añadiendo que a él no le pagan «por opinar», sino por publicar datos. Para concluir, ha recordado el informe de 'Reporteros sin fronteras' en el que afirmaban, en 2017, que en Cataluña se llevó a cabo una «atmósfera tóxica contra la libertad de prensa». «Lo lamentable es que estos se haya contagiado al resto de España», ha espetado.