Según ha informado Jefatura en un comunicado, la intervención, llevada a cabo por efectivos de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Elche, tuvo su inicio tras una llamada de la empresa de seguridad contratada por el local al 091 durante la madrugada, en la que comunicaron un salto de alarma en el establecimiento.
En ese momento, los agentes se desplazaron al lugar con celeridad y pudieron sorprender a un varón vigilando la puerta del local que, al percatarse de la presencia policial, intentó huir a la carrera, pero fue alcanzado y retenido en el momento.
Posteriormente, los efectivos policiales se percataron de claros síntomas de forzamiento en los accesos al local, como la fractura del cristal de una de las ventanas y que el bombín de la puerta estaba arrancado. Si embargo, la sorpresa fue aún mayor cuando sorprendieron al otro de los asaltantes, todavía en el interior del local, que había tratado de huir por una pequeña ventana en la que terminó quedándose atascado. Además, tuvo que ser ayudado por los agentes para salir del angosto marco en el que se encontraba atorado.
Así, tras inspeccionar el interior del establecimiento, vieron que se encontraba completamente revuelto y, además, la caja registradora estaba fracturada y vacía después de que se hubieran apoderado de todo el dinero que había en su interior. Además, en el suelo del bar hallaron un destornillador de grandes dimensiones utilizado para el forzamiento y botellas de bebidas alcohólicas que también iban a robar.
Finalmente, ambos varones, con múltiples antecedentes por hechos de la misma índole, fueron detenidos por un delito de robo con fuerza en las cosas.
Los arrestados, de 43 y 54 años de edad, de nacionalidad francesa y española respectivamente, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Elche.
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