«Quería estamparme la cabeza contra la pared»: despedida de un restaurante tras denunciar los abusos del gerente

En esta ocasión se ha hecho eco de la carta que la empleada de un restaurante de Elche -perteneciente a una franquicia, cuyo nombre no ha trascendido- remitió a Recursos Humanos tras recibir la visita del gerente de su área.

El escrito está firmado por los testigos de lo ocurrido el sábado 18 de noviembre «a la espera de que no se vuelva a repetir» una situación similar. Sin embargo, dos días después, según cuenta Soy Camarero, la trabajadora recibió como respuesta otra carta: la de despido.

El relato de los hechos que realiza la trabajadora es dantesco, teniendo en cuenta que la visita del responsable apenas duró tres horas. Tiempo suficiente para poner «nervioso» al personal.

Lo primero fue quitarle el móvil del restaurante de la mano y advertirle de que no avisará a nadie de su presencia. «Me dijo: prepárate porque este día va a ser el peor de tu vida», señala en el documento.

«Soporté todo tipo de gritos» frente a clientes y compañeros, a los que también le obligó a advertirles gritando de lo que no estaban haciendo correctamente. «Ella mañana te presenta una baja por estrés laboral», afirma que le indicó sobre otra empleada.

Un mal trago que también vivieron la encargada de las patatas y la cajera, amenazadas con ser despedidas. «Esta chica está haciendo sociales, que no se mueva de ahí y cobre rápido o mañana está en la calle», cuenta la carta que dijo el gerente de la chica que atendía los pedidos de los comensales, justo la jornada en la que los datáfonos no funcionaban.

«Después de decirme que no había sido un buen turno, me pidió la baja voluntaria, a lo cual respondí que no. Y luego para terminar su visita me dijo que quería estamparme la cabeza contra la pared», asevera la denunciante en su escrito a Recursos Humanos.

El perfil de X –antes Twitter- de Soy Camarero se ha llenado de comentarios que exigen conocer el nombre de la franquicia responsable del local situado en el municipio ilicitano y animando a los afectados a tomar medidas legales.