Los 69 pueblos de montaña de la Comunidad Valenciana superan el reto que lanzaron al British Museum en una carta

Son 61.657 visitas por encima de las que se habían planteado conseguir para equiparar el número de personas que accedieron a la galería británica en el mismo periodo de tiempo el año anterior. De lo contrario, podrían haber terminado como objetos de museo en Londres. Solo Olocau y Morella sumaron en el mes del desafío más de 9.000 visitas.

Para celebrar la superación del reto, los pueblos de montaña españoles han vuelto a remitir una carta a Mark Jones, director del British Museum, a la que, además de inmortalizar su redacción en un nuevo vídeo, pone voz el primer edil de la localidad castellonense de Montán, Sergio Fornas, y que firma Miguel Gracia, presidente de la entidad, en nombre de los 280 municipios.

En esta ocasión, para invitarle a conocer los encantos patrimoniales, culturales y gastronómicos de estos enclaves únicos: «Ya que el British Museum no va a poder exponer ninguna pieza de nuestro emblemático patrimonio, sí que queremos trasladarle la hospitalidad que nos caracteriza; está usted invitado a visitarnos. No tiene más que decirnos qué municipios le gustaría conocer y preparemos una visita a su altura», reza la misiva.

La misma, contiene, además, el «alivio» que significa para los primeros ediles haber superado el desafío: «No solo es un alivio pensar que ninguno de nuestros pueblos pasará a engrosar la maravillosa colección que atesora el British Museum», explican, «lo que más feliz nos hace es haber comprobado que somos uno de los destinos preferidos de muchísimas personas que han pasado por aquí a disfrutar de nuestra hospitalidad».

Según destaca EsMontañas, «la respuesta de las personas ha sido espectacular, con una tónica general de un incremento medio de visitas a los pueblos de montaña por encima del 20 % respecto al mismo periodo del año anterior».

Con todo, la entidad destaca algunos casos que «han contribuido, aún más si cabe, a poder superar el reto». Entre los ejemplos citados se encuentran municipios como Tejeda (Gran Canaria), que ha sumado más de 60.000 visitantes; Olocau (Valencia), con 1.375 visitantes, Puebla de Sanabria, con 6.190 visitantes; o Morella, con más de 8.000 visitas.

Desde la Asociación Española de Pueblos de Montaña, afirman: «Estamos sorprendidos y encantados con la respuesta que ha dado la ciudadanía al reto, gracias a la cual hemos conseguido inyectar vida a unos municipios que necesitan de la gente para su preexistencia y que atesoran un entorno y un patrimonio maravillosos».

Los pueblos de montaña de la Comunidad Valenciana representan casi un tercio del total de los 280 municipios de ámbito nacional que se sumaron a la iniciativa.

En total son 69 localidades: 39 de la provincia de Valencia (Alcublas, Alpuente, Andilla, Aras de los Olmos, Benagéber, Bicorp, Bocairent, Bolbaite, Casas Altas, Casas Bajas, Castielfabib, Catadau, Chella, Chulilla, Cofrentes, Domeño, Dos Aguas, Enguera, Gestalgar, Higueruelas, Jalance, Jarafuel, Llíria, Llombai, Marines Viejo, Millares, Moixent, Navarrés, Paterna, Olocau, Quesa, Requena, Sinarcas, Titaguas, Tous, Tuéjar, Utiel, Vallada y Yátova); 6 de Alicante (Beneixama, Calpe, Gaianes, Ibi y Pego); y 24 de la provincia de Castellón (Argelita, Bejís, Castellfort, Caudiel, Chodos, Cinctorres, Cirat, Espadilla, Forcall, Jérica, La Mata, La Pobla de Benifassà, Montán, Morella, Portell de Morella, Puebla de Arenoso, Sacañet, Sueras, Soneja, Todolella, Toga, Torrechiva y Viver).

La Asociación reforzó la metodología utilizada por los pueblos para el conteo de visitas, tanto en los municipios con oficinas de turismo, como con la habilitación de contadores de paso en pueblos de referencia estadística como los señalados; así como en elementos patrimoniales que aglutinaron las visitas de los turistas.

La asociación, que aglutina 280 pueblos de montaña españoles, nació en 2013 para promover iniciativas legislativas y otras acciones para mejorar la vida de quienes viven en zonas de montaña, frenar la despoblación y generar desarrollo económico y social, quiere «fomentar la participación de los amantes de la naturaleza y de los espacios únicos, de tranquilidad, con gastronomía o puntos de interés histórico y etnográfico, a que se sumen al reto con su visita a nuestros pueblos».