El PSOE valenciano nombra a la ministra Morant como nueva líder sin oposición tras intervenir Ferraz

«Los socialistas estamos aquí para defender el derecho de la gente a ser libre, a decidir sobre nuestra sexualidad y la lengua en la que nos expresamos», ha declarado durante su proclamación, como posicionamiento de dos de sus objetivos primordiales. «Vamos a ser el dique de contención de las políticas ultras del Consell más ultra que ha tenido nunca la Comunitat Valenciana», ha añadido, además de expresar su agradecimiento al predecesor en este cargo orgánico -Ximo Puig- y su optimismo y confianza en los próximos resultados electorales del partido: «Este es el PSPV-PSOE que va a ganar las elecciones de 2027».

Morant llegará como relevo de Ximo Puig al congreso extraordinario que el PSPV celebrará en Benicàssim entre el 22 y 24 de marzo. Un cónclave que pondrá fin a la era del dirigente que ganó las primarias de 2012 y devolvió, tras años después, la Generalitat a los socialistas tras dos décadas de oposición al PP .

Un movimiento orgánico de calado con el que también gana la dirección federal liderada por Pedro Sánchez, que nunca acabó de tener sintonía con Puig -uno de los barones que forzaron su caída en 2016- y que ahora tendrá hilo directo con la federación valenciana.

El temor a las guerras internas entre familias que rompieron el partido en pedazos a finales del siglo pasado ha sido el principal argumento para que Ferraz pilotara un proceso que se inició en diciembre con el anuncio de Puig de dar un paso atrás.

Desde Madrid se quiso armar sin éxito una candidatura de consenso en torno a Diana Morant, pero los líderes provinciales de Valencia y Alicante, Carlos Fernández Bielsa y Alejandro Soler, estaban dispuestos a dar la batalla apelando a la necesidad de escuchar a las bases -alrededor de 18.000 afiliados- y haciendo valer su poder territorial. Un músculo orgánico del que Morant todavía carece, pues se afilió al partido en 2011, mientras Bielsa y Soler llevan años tejiendo redes para escalar posiciones.

La Ejecutiva del PSPV que tenía que fijar las fechas en el calendario congresual se pospuso en dos ocasiones, a la espera de un acuerdo que no llegaba pese a que las negociaciones nunca se cerraron. Ferraz movió ficha cuando la partida estaba abocada a los designios de la militancia. El temor a un resultado incierto se sumaba al eco mediático que podrían generar unas primarias a doble vuelta -si ninguno de los aspirantes alcanzaba el 50% de los apoyos en la primera votación- con una ministra en el foco y justo una semana después -el 25 de febrero- de las elecciones gallegas.

No habían pasado ni 24 horas desde que los tres habían formalizado pública y oficialmente sus precandidaturas, cuando el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, les llamó a filas. De esa reunión el pasado 30 de enero en la sede de Madrid salió un pacto que todavía guarda algunos detalles, pero que otorga a Diana Morant el control del PSPV. Todo ello, sin hablar de proyectos, más allá del objetivo común de plantar cara a la derecha para volver a gobernar en 2027. Alejandro Soler será presidente de la futura ejecutiva -un cargo honorífico-, mientras Carlos Fernández Bielsa se erigirá como vicesecretario general único tras integrarse en el equipo de Morant.

La principales figuras públicas del partido -la mayoría del sector 'ximista'- habían cerrado filas en torno a ella, que quiso hacer una demostración de fuerza en la presentación de su candidatura en Gandia ante más de medio millar de personas. Un acto que se celebró en la misma plaza en la que inició, junto a Sánchez, la carrera electoral para convertir en alcaldesa de la localidad valenciana, cargo que asumió entre 2015 y 2021. Fue, además, la única que se dirigió a la militancia en valenciano.

El reto que afronta ahora es doble: ganar apoyos entre el socialismo valenciano y compaginar la labor de ministra con la oposición al Gobierno de PP y Vox que lidera Carlos Mazón para ser candidata a la Generalitat -si no hay sorpresas- en las próximas autonómicas. De momento, Morant ha iniciado una gira de encuentros con las distintas agrupaciones locales y comarcales y ha intensificado su agenda institucional en las tres provincias.

Apariciones con las que, además, tendrá que paliar su ausencia en las Cortes Valencianas, como ya le ocurrió al presidente Mazón en la carrera hacia el Palau. Mientras, se sigue negociando la configuración de la futura Ejecutiva y el Comité Nacional del PSPV, que los delegados deberán ratificar en el congreso de marzo.