Pau, de policía novel a héroe por salvar a una mujer tras enfrentarse a un maltratador en plena calle

Según detalla el cuerpo policial, Pau es un agente de proximidad perteneciente a la última promoción. El pasado domingo 2 de julio, escuchó desde su casa los gritos de una mujer que estaba siendo agredida por un hombre en la vía pública. Fuera de servicio, «no dudó ni un instante en salir a protegerla», relata.

«Frente a esa situación sólo estoy. Aquí no hay nadie más y no van a venir a ayudarme», explica Pau, quien avisó a sus compañeros y al 112 para que se personaran de manera urgente, pero a sabiendas de que no tenía más remedio que intervenir.

«Estaba en mi casa viendo la tele a punto ya de dormir cuando escuché los gritos. No me lo pensé y bajé con lo puesto», recuerda. En ese momento, una vez se identificó como policía a la víctima, le preguntó si había sido agredida, a lo que respondió de forma afirmativa, pese a estar «llorando y en un estado de nervios bastante elevado».

Pocos minutos después, el agresor se giró sobre sus propios pasos y se dirigió nuevamente hacia la víctima de manera muy agresiva. «En ese momento, intento calmarlo por todos los medios porque yo iba con lo puesto. Me empezó a pegar golpes en las costillas y uno de ellos me produjo una luxación. Sentí mucho dolor, me desequilibré y caímos los dos en un banco», señala Pau.

En ese momento de máxima tensión, de repente, apareció «la luz azul», como lo recuerda el policía. Eran sus compañeros, a los que llevaba esperando unos dos minutos que se le hicieron «eternos». «A partir de ahí, tanto el indicativo 540 de noche como un zeta de la Policía Nacional y yo conseguimos detener a esta persona hasta que vino el grupo GAMA para atender a la víctima», comenta.

«Lo volvería a hacer una y mil veces y animo a todas las personas que vivan una situación así que no tengan miedo de llamar a emergencias, dar toda la información posible para ayudar a detener a un presunto agresor y maltratador», concluye el heroico policía.