La ministra Diana Morant ya tiene rival para liderar el PSOE valenciano

«Queremos que la candidatura se ensanche para incorporar a toda la organización», ha afirmado, en lo que supone un desafío a la dirección nacional encabezada por Pedro Sánchez, que trata de impulsar a la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, como relevo de Puig.

La fecha elegida para mover la ficha que abre la partida no es casual. El Comité Nacional que se celebra este sábado tiene que ratificar el calendario previsto hasta el congreso extraordinario de finales de marzo, que contempla unas primarias el 25 de febrero. Entre el próximo lunes y martes, los aspirantes deben hacer oficial su precandidatura para empezar la recogida de avales. Las negociaciones fuera de foco para armar un proyecto de consenso entorno a la elegida por Ferraz no han fructificado. Pero «siguen abiertas».

La propia Morant, que ya se ha postulado sin rodeos ante los medios como aspirante a ese proceso, ha tendido la mano a Soler. Ha incidido en que «vale la pena» intentar alcanzar un acuerdo entre los posibles candidatos, «que tenga en cuenta todas las sensibilidades que hay dentro del partido», con el objetivo de recuperar la Generalitat en 2027. «Yo estoy trabajando para ello y todavía estamos en tiempo de poderlo lograr», ha asegurado.

«Quizá mi juventud me lleva a pensar que se puede hacer un proyecto de partido sin sectarismos, sin familias, sin partes, todos formamos parte de lo mismo», ha agregado.

Por tanto, el pacto con Soler no está descartado. Los contactos entre los dos y la agenda de la titular de Ciencia en la Comunidad Valenciana se han intensificado en los últimos días, pero las posiciones siguen alejadas. El núcleo duro de Pedro Sánchez busca atajar una guerra interna que, a todas luces, dañaría la imagen de su ministra, a la que además de Ferraz también respalda la corriente de Ximo Puig.

El dirigente alicantino y diputado nacional ha sido el que más claro ha mostrado sus intenciones. Tras el vuelco a la derecha de las elecciones del 28 de mayo, fue el primero en enseñar la puerta de salida al todavía secretario general del PSPV. La unión de ambos dejaría sin opciones al tercero en discordia, que de momento guarda silencio. El líder provincial de los socialistas en Valencia, Carlos Fernández Bielsa, también ha dado señales de que está preparando a su propio equipo.

Soler y Bielsa –los dos del sector crítico con Puig– se pasearon el miércoles por Fitur exhibiendo sintonía para elevar la presión ante Morant, aunque algunas fuentes apuntan a que un pacto que sume el músculo orgánico de ambos en sus respectivos feudos es prácticamente imposible, pues ninguno está dispuesto a ceder el trono al otro.

La exalcaldesa de Gandia, cuestionada por los medios, evitó pronunciarse sobre la posibilidad de establecer una estructura bicéfala en el partido, con un secretario general y una cabeza de cartel a las autonómicas diferentes. Una posibilidad que Soler –más próximo a la 'familia' del exministro José Luis Ábalos– habría deslizado, pero que también entraña sus riesgos, pues podría no verse con buenos ojos entre los de Puig.

A la presentación de la candidatura de Alejandro Soler en la sede del PSPV de Elche acudieron ayer por la tarde alrededor de 300 personas. Entre ellas, alcaldes, concejales, diputados nacionales y provinciales de Castellón, Valencia y Alicante.

En ese sentido, Soler abogó por volver a un proyecto de «unidad» que «pertenezca a los municipios» y se comprometió a «recorrer cada organización» para nutrirlo con «múltiples aportaciones» y «activar» el partido.

«Queremos conformar un proyecto que hable claro, directo, que sea auténtico y que evite cualquier clase de impostura», al tiempo que represente a toda la región, insistió. Preguntado por lo que le diferencia del resto de aspirantes, Soler afirmó que su candidatura «aporta experiencia, visión periférica de la Comunidad Valenciana y elementos extraordinarios para poner en valor».