La investigación dio inicio el pasado 5 de julio, cuando se denunció un robo en un restaurante tras haber sido forzada la persiana metálica. Por otro lado, al día siguiente, una mujer denunció ante los agentes haber sufrido un tirón de bolso en plena calle, lo que también fue señalado como robo con violencia.
Los indicios llevaron a los guardias civiles hasta una gasolinera de la CV-20 en el término municipal de Onda, donde el presunto autor sufrió un accidente tras cometer un robo. La coincidencia de rasgos físicos, incluso de tatuajes, unida a otras cuestiones más técnicas, permitió su identificación.
La Guardia Civil estableció entonces un dispositivo de vigilancia en distintos puntos de la zona, logrando detener al sospechoso el jueves 10 de julio cuando salía de una finca donde se ocultaba. En el momento de la detención portaba una cartera con 430 euros en billetes fraccionados, que se sospecha podrían proceder de los hechos delictivos.
Además, tras su detención, se tuvo conocimiento de otro robo ocurrido esa misma madrugada en un quiosco de la localidad en el que se utilizó el mismo modus operandi: forzamiento de una persiana y sustracción del dinero de la caja. En este caso, varios indicios permitieron vincular nuevamente al detenido con el suceso.
La operación ha sido desarrollada por efectivos del Puesto Principal de la Guardia Civil de Onda y las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Guardia de Nules, que ha decretado su ingreso en prisión provisional.
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