Juicio a la manada de Valencia: «Iban de risas y se lo estaban pasando muy bien»

Tanto en la vista oral celebrada este miércoles como en la identificación tras la agresión ocurrida en 2019, la víctima ha corroborado que los detenidos fueron dos de los hombres que la violaron en grupo, aunque las pruebas de ADN no son concluyentes.

La joven, que ha declarado tras una mampara para preservar su imagen, ha relatado que se separó de su grupo para ir al baño, donde permanecía esperando para entrar cuando de repente la cogieron del brazo. «Había mucho movimiento de gente, me dijeron que necesitaban ayuda y en pocos segundos ya estaba dentro del baño de chicos. Ahí me vi a otros tres hombres que empezaron a reírse». «Me tocaban, abrazaban y apretaban. Me metieron dentro y cerraron la puerta, entonces me tiraron a suelo y me dejaron de rodillas para hacerles una felación», subrayó.

Durante la vista, señaló «al de rojo», uno de los investigados, como el cabecilla de la manada. «Se salieron dos y cerraron la puerta otra vez. Ahí me cogieron del pelo para levantarme y me apoyaron contra la pared», posteriormente fue agredida por última vez con penetración, no sin antes marcharse los presuntos agresores haciéndole una zancadilla. «Iban de risa, parecían que se lo estaban pasando muy bien», comentó.

Pocos minutos después, abandonó la discoteca aturdida y desorientada hasta que encontró a una amiga que alertó a la Policía. «Nada más salió un dije, 'ese es'». «Trabajo de cara al público y si veo una cara me quedo con ella», añadió.

Por su parte, los acusados de agredir a la chica negaron los hechos y argumentaron que desde el primer momento mostraron su colaboración con la Policía para desmentir tales acusaciones. «Ofrecí cualquier prueba, quería que todo aquello se aclarara», afirmó uno de los jóvenes que, como el segundo investigado, cambiaron su aspecto físico antes del reconocimiento en el juzgado atribuyéndolo al hostigamiento que decían sufrir por redes sociales.