Según apunta la Fiscalía en su relato de acusación, comunicado por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), procesado y víctima se conocieron durante el verano de 2020 en las reuniones de la congregación religiosa a la que ambos pertenecían.
De acuerdo con la misma descripción de los hechos, facilitada por el ministerio público, en enero de 2021 iniciaron una relación sentimental en la que el procesado, de 22 años en ese momento, le pidió que le mandara fotos de contenido erótico. Meses después, el hombre comenzó a llamarla por videollamada para mantener cibersexo.
Finalmente, en junio de 2021 la menor acudió a casa del acusado, en Valencia, donde mantuvieron relaciones sexuales, siempre según el relato de la Fiscalía, que pide provisionalmente una pena de prisión de 20 años para el encausado al que acusa de los delitos de abuso sexual y corrupción de menores.
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