Jornadas de 12 horas y salarios ínfimos: así revientan el mercado de las reformas y la limpieza con inmigrantes irregulares

Según ha informado Jefatura en un comunicado, la investigación policial dio inicio tras tener conocimiento los agentes de la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental de la Comisaría Provincial de que, en una empresa de limpieza y pequeñas reformas de la capital alicantina, se estaba dando empleo a ciudadanos extranjeros en situación irregular y sin contrato de trabajo, quienes eran sometidos a jornadas laborales excesivas por las que percibían un salario ínfimo.

Ante estos hechos, los agentes realizaron las primeras gestiones encaminadas al esclarecimiento de los hechos para identificar y detener a los responsables de la empresa. En este sentido, comenzaron por averiguar que la empresa era regentada por dos personas, un hombre y una mujer, dadas de alta como autónomos y que tenían a su cargo a tres empleados.

Si bien, a pesar de que eso era lo que revelaban las bases de datos de la Seguridad Social, en las vigilancias realizadas por los agentes se descubrió que alrededor de 25 personas uniformadas bajo el logotipo de la empresa entraban y salían de las oficinas con utensilios de limpieza, para luego desplazarse en varios vehículos de la compañía hasta diferentes edificios de la ciudad donde realizaban su labor.

Asimismo, para culminar la investigación, los agentes contaron con la colaboración de la Inspección de Trabajo de Alicante, junto con los que se realizó un registro en la empresa de limpieza, donde hallaron un total de 29 personas, los dos regentes y 27 trabajadores de los cuales sólo tres estaban dados de alta en la Seguridad Social. Los otros 24 carecían de contrato laboral y sólo tres de ellos estaban en situación regular en el país.

Ante estos hechos, los agentes detuvieron a los dos regentes y al encargado de la empresa acusados de los delitos de pertenencia a grupo criminal, favorecimiento de la inmigración irregular y contra los derechos de los trabajadores.

Por otro lado, la investigación concluyó que las víctimas llegaban a realizar jornadas maratonianas de trabajo de unas 12 horas, ni siquiera tenían establecida una hora fija de finalización de su jornada laboral e, incluso, sólo podían descansar un día a la semana.

Sin embargo, esta no era la parte del todo preocupante, y es que el salario que percibían estaba muy por debajo del establecido según el convenio laboral. De hecho, algunas de las víctimas habían estado trabajando para la empresa durante dos años, aprovechándose los arrestados de su situación irregular, sabedores de que estos empleados no tenían otro medio de subsistencia posible.

Además, y tras ser revisada la documentación intervenida durante la inspección, los agentes hallaron lo que parecía ser una «contabilidad B» de la empresa, por lo que se siguen realizando gestiones para determinar si los detenidos estuvieran incurriendo también en un posible de delito de blanqueo de capitales.

Los detenidos, dos varones y una mujer de entre 29 y 48 años de edad, todos de nacionalidad española, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Alicante.

Finalmente, en cuanto a la repercusión dentro del sector al que se dedicaba este entramado empresarial, es destacable este modo ilícito de actuar les permitía ofrecer precios tan competitivos que prácticamente no tenían competencia, generando un desmoronamiento en los precios de trabajo al ofrecer sus servicios a precios muy por debajo del coste con los que empresas legales no podían competir.