'Enemigo del pueblo', de Francisco Coll, un hito en el Palau de Les Arts

Musicalmente 'Enemigo del Pueblo' es una obra que atrapa desde el primer momento y no nos suelta. Bien es cierto que el asunto que trata la obra original de Ibsen contribuye pues nos invita a la reflexión y a la implicación, en definitiva, del espectador, y más en estos tiempos.

El panorama musical valenciano vive una época dorada con hitos que desgraciadamente, no es que pasen desapercibidos, pero sí que, por razones sobre las que ahora no es momento de abordar, quizás no se valoran mediáticamente fuera de nuestra geografía, en su justa medida.

Uno de estos es la irrupción de la fulgurante figura de Francisco Coll (Valencia 1985), eso sí reciente Premio Nacional de Música y una de las luminarias más importantes de la composición internacional. No se recuerda un éxito semejante por estos lares de una obra musical contemporánea y más tratándose de un estreno absoluto, el primero de una obra operística en Les Arts. Además, una obra escrita con criterios de modernidad, experimentación y sin concesiones y sin ir a la búsqueda del aplauso general del público. Pero es que, sin ser música para oídos perezosos, Coll nos atrapa.

Empezando por la historia que nos cuenta, hace años asistí en Madrid a la obra teatral de Ibsen y es evidente que se trata de un texto marcado por la desesperanza, de principio a fin. Hay una soterrada melancolía a lo largo y ancho de sus pesimistas, tristemente realistas y modernas páginas. Y, dado que fueron estrenadas en 1882, no pueden ser más certeras, por visionarias, si atendemos a la situación actual de nuestro contexto y de lo acaecido a lo largo y ancho del siglo pasado.

El pueblo no siempre tiene razón puesto que muchas veces es zarandeado por quienes realmente se reparten los réditos obtenidos de su manipulación. Que el pueblo salva al pueblo es algo que está lejos de ser real. Rigola refleja con fidelidad las ideas del escritor noruego y hace un trabajo a la altura que demanda la música de Coll.

La segunda ópera de Francisco Coll tras 'Café Kafka' todavía significa una mayor profundización en su personal lenguaje cada vez más reconocible, y a la vez una vuelta de tuerca más en la madurez desde el punto de vista dramático y en la complejidad armónica de la orquesta. Coll que trata la narración instrumental de forma muy particular combinando frases cortas en fortísimos, de gran carga asertiva, otorgando un importante papel a la percusión, combinadas con momentos de gran belleza estática empleando el color orquestal para los momentos más descriptivos.

La libertad creativa es una de las características de la música de Coll y en esta ópera la lleva a sus últimas consecuencias, aun cuando, si el libreto se refiere al pueblo o a los administradores de este, no duda en introducir elementos de la tradición musical española clara e intencionadamente deformados grotescamente hasta la caricatura .

El compositor valenciano describe musicalmente de forma magistral la tensión entre intereses mutuos irreconciliables. Por diversas ocasiones, aunque puedo admitir cierta precipitación en la valoración, puesto que se trata de una obra no escuchada con antelación, por momentos veo sobrevolar sobre esta producción y, por qué no, en la música el Peter Grimes de Benjamin Britten, teniendo en cuenta también la bella y evocadora puesta en escena de Rigola con el omnipresente mar de fondo y en primer plano una costa de dunas, el personaje del Doctor, en práctica soledad frente al pueblo constituido como una turba, los inquietantemente bellos y expresivos interludios orquestales, la expresiva percusión…

Sensacionales todos los cantantes que lo dieron todo en sus comprometidos roles. José Antonio López se llevó las mejores ovaciones por una actuación sin fisuras y dramáticamente de gran nivel. Moisés Marín encarnó el papel del alcalde en un rol de gran virtuosismo vocal con agudos verdaderamente temibles que nos recordaron al capitán jefe de Wozzeck en la obra maestra de Alban Berg. Difícil no empatizar con una estupenda Brenda Rae hija de protagonista.

Cumplieron con solidez tanto Isaac Galán encarnando al director del periódico y Marta Fontanals-Simmons. Extraordinaria la camaleónica OCV en esta compleja partitura pues interpretar a Coll siempre es un reto, y a destacar, en el turno de saludos, el ruidoso pateo que le brindaron los profesores al maestro cuando salió a saludar. Excelente también el Cor de la Generalitat en una obra que ya tenemos ganas de volver a escuchar.

La obra en coproducción con el Teatro Real, se estrenará en la capital de España en 2026 y a buen seguro que será otro éxito. Dicho esto, solo queda expresar un deseo que espero pueda llevarse a cabo más pronto que tarde en el que, ojalá, participen los cuerpos estables de Les Arts: la grabación de la obra. Proyecto de debería ser irrenunciable y a no muy tardar.

Palau de Les Arts

Domingo, 17 de noviembre de 2025

Francisco Coll. Enemigo del Pueblo

Libreto de Àlex Rigola sobre la obra de Henrik Ibsen

José Antonio López, Moisés Marín, Brenda Rae, Isaac Galán, Marta Fontanals-Simmons

Cor de la Generalitat

Orquestra de la Comunitat Valenciana

Dirección de escena y libreto: Àlex Rigola

Dirección musical: Francisco Coll