«Nuestros hijos contarán ahora con la oportunidad de estudiar en español»: familias y docentes celebran el cambio político en Valencia

En su valoración del 28M por lo que concierne a la política en esta materia, al tener en cuenta el posicionamiento de los partidos, ya que PP y Vox se mostraron comprometidos para un cambio sustancial (mientras que PSPV-PSOE, Compromís y Unides Podem no contestaron a la encuesta de Idiomas y Educación), esta asociación ha acogido con esperanza este relevo autonómico.

«El resultado de las elecciones es un rotundo no a la imposición lingüística, el adoctrinamiento identitario y al separatismo de los 'países catalanes', el electorado se ha pronunciado con claridad por la unidad de España», han valorado.

Además de reclamar a los futuros dirigentes de la Generalitat, liderados ahora por el popular Carlos Mazón como presidente, la eliminación de la antes citada legislación que impide a sus hijos y alumnos estudiar en la lengua materna, «el mejor recurso para evitar el fracaso escolar», también van a plantear que se elimine el requisito lingüístico y los méritos ligados al idioma para los docentes y los funcionarios, en general.

«Se trata de un aspecto que discrimina a los trabajadores del sistema público», a su juicio, aparte de influir en algunos padres que, por temor a limitar la proyección personal de sus hijos, acatan la imposición del idioma.

«El requisito también se presenta como un chantaje que cambia las prioridades de los padres para escolarizar a sus hijos en una lengua diferente a la que necesitan para una mejor educación», denuncian desde esta plataforma nacida en Alicante y de ámbito autonómico para la Comunidad Valenciana.

Recientemente, ya advirtieron junto con Escuela de Todos -agrupación nacional en la que Idiomas y Educación está integrada junto a otra veintena de asociaciones- de que impedir a los escolares aprender en su lengua materna repercute en su rendimiento, y pusieron como ejemplo palmario los datos negativos del informe PIRLS sobre comprensión lectora, con los peores resultados en Cataluña.

«España ya se ha convertido en el único país de Europa en donde no se puede estudiar en su lengua oficial, algo que ocurre en diversas comunidades autónomas con lengua cooficial», señalan, una realidad que esperan corregir ya en la Comunidad Valenciana y Baleares gracias al «claro posicionamiento de los votantes para luchar contra este despropósito».

También con la referencia comunitaria, esta plataforma recuerda que «Europa, a través de sus Escuelas Europeas, defiende un modelo que sí permite a los hijos de los funcionarios europeos estudiar en diferentes lenguas, con el objetivo de respetar la lengua materna de cada niño. Se trata de un referente lingüístico educativo que dista del modelo Marzà».

Finalmente, Idiomas y Educación reivindicará a la Generalitat una «correcta regulación en la denominación de topónimos, con el fin de recuperar los nombres de lugares en español».