La localidad alicantina de Petrer rindió homenaje este sábado a Aitor Esteban, el niño de ocho años que murió en 2020 por una peritonitis tras acudir cinco veces a Urgencias en tres días con vómitos y dolor abdominal. El menor habría cumplido diez años ... justo en la semana en la que se han conocido novedades judiciales en su caso.
Su abuela y tutora legal, Marta Gonzalvez, agradeció el apoyo en su lucha a los asistentes al emotivo y sencillo acto de recuerdo que se celebró en el parque El Campet del municipio. «Mi hijo desde ahí arriba os lo agradece también», señaló. «Para mí, Aitor será siempre un héroe. Lo fue hasta el último momento», indicó antes de que una cantante interpretara «Mi héroe» de Antonio Orozco, acompañada por un pianista.
No es la primera vez que la familia de Aitor organiza un acto en memoria del niño. Ya ocurrió en 2021 con motivo de su cumpleaños. Además, el pasado mes de junio el Ayuntamiento de Petrer instaló una placa en recuerdo del pequeño, en la que se destaca su implicación por mejorar el barrio en el que residía. Un grupo de Facebook -Justicia para Aitor- con más de mil miembros también mantiene viva la lucha de su familia.
La investigación abierta en los tribunales debe determinar si hubo o no negligencia médica ante el fallecimiento del niño el 28 de octubre de 2020, una fecha de la que este mes se cumplirán dos años. Esta semana la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Elda ha imputado a dos médicas que atendieron al menor y las ha citado a declarar el próximo 12 de diciembre.
Un informe pericial solicitado por la magistrada ha determinado que pudo haber «mala praxis» en la actuación de la doctora del hospital de Elda que lo envió de vuelta a casa dos días antes de que falleciera sin hacerle exploraciones complementarias pese a los síntomas que arrastraba. En el momento de examinarlo, no estaba supervisada por un superior
También a la pediatra del centro de salud que, sin más exploración, le administró una medicación «inadecuada» que pudo acelerar la peritonitis. De hecho, pocas horas después Aitor murió en su casa, según ese informe, como consecuencia de una infección en el intestino grueso que derivó en una rotura del diafragma.
Hasta ese momento, en un contexto de saturación hospitalaria por la pandemia, no se le había realizado ninguna ecografía ni análisis de sangre para conocer el motivo de las molestias del pequeño y se le había tratado con analgésicos para el dolor y otros medicamentos para frenar los vómitos.
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