La exposición, comisariada por la directora del Musée d'Ixelles, Claire Leblanc, ofrecerá por primera vez en Valencia un completo y singular panorama de las principales tendencias pictóricas desarrolladas en Bélgica desde finales del siglo XIX hasta mediados del siglo XX. El recorrido propuesto por el mejor arte moderno belga se realizará a través de 77 obras de 53 artistas, entre los que destacan nombres tan reconocidos como James Ensor, René Magritte o Paul Delvaux, que conviven con otros grandes creadores belgas como Jan Toorop, Émile Claus, Anna Boch, Fernand Khnopff, Léon Spilliaert o Jos Albert, entre otros muchos.
La muestra, que podrá visitarse hasta el 30 de julio, refleja la evolución artística en Bélgica que va del realismo al surrealismo, pasando por las vanguardias propias desarrolladas en este periodo de búsqueda de modernidad y en el que el arte belga destacó por su libertad creativa, color deslumbrante y sus atmósferas enigmáticas. El conjunto de obras que se presentará en la exposición revela las influencias internacionales de las que bebió el arte belga y, al mismo tiempo, sus características específicamente locales, dando lugar a propuestas muy avanzadas donde conviven el atrevimiento creativo y la tensión entre el apego a la realidad y la propensión a la imaginación desbordante.
La exposición, con un discurso cronológico, se estructura en torno a cuatro secciones que corresponden a diferentes movimientos pictóricos: el realismo y los orígenes del paisaje naturalista; el impresionismo y sus derivaciones; el simbolismo y las vanguardias fauvista y expresionista; y el surrealismo.
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