La investigación policial tuvo su inicio tras varias denuncias presentadas por el gerente de la empresa afectada que a lo largo de varios meses se percató de numerosas pintadas en contra de su negocio por diferentes zonas de la localidad ilicitana.
En el transcurso de la investigación, los agentes comprobaron que el presunto autor de las pintadas elegía lugares poco transitados, alejados de la ciudad y en horas nocturnas para evitar la presencia de testigos, tratando de dificultar la labor policial.
Tras diversas gestiones realizadas sobre el entorno de la asesoría afectada, los agentes pudieron identificar al presunto autor de los hechos, tratándose de un varón que regentaba un negocio del mismo sector y con el que uno de los empleados había trabajado años atrás.
Una vez detenido, los agentes pudieron relacionar todas las pintadas con el mismo autor gracias al estudio realizado por la división de Grafística y Vandalismo de la Policía Local de Elche con el que se pudo determinar que todas las pintadas habían sido realizadas por la misma persona.
Además de su participación en los delitos de injurias y calumnias por los mensajes difamatorios, el detenido también fue acusado por un delito de daños al haber causado un perjuicio económico a la empresa afectada de más de 1.000 euros que fueron empleados para la reparación de los desperfectos ocasionados.
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