Desarticulan un grupo de grafiteros que pintaba trenes a plena luz del día en Valencia y difundía los actos en redes

Según ha informado el instituto armado, los presuntos autores actuaban de manera reiterada y a plena luz del día, cubriéndose el rostro con gorras y bragas de cuello para evitar ser identificados por las cámaras de seguridad, hasta que «eran observados por los viajeros y huían entre gritos y carcajadas», después de realizar el graffiti. En total, se les atribuyen 16 delitos de daños, que habrían causado pérdidas superiores a los 33.000 euros.

Además, la investigación ha revelado que los implicados difundían las pintadas en redes sociales, donde publicaban vídeos y fotografías de los grafitis realizados de forma ilícita. Tal y como ha indicado la Benemérita en un comunicado, estas publicaciones llegaron a tener repercusión internacional, ya que los autores se desplazaban tanto por España como por otros países para plasmar sus firmas y posteriormente publicarlas en redes sociales.

La investigación comenzó el 7 de enero de 2025, a raíz de numerosas denuncias presentadas por empresas del sector del transporte. Así, durante las pesquisas, las autoridades recopilaron varias denuncias por hechos similares, acompañados de material fotográfico y audiovisual que fue estudiado por los investigadores. Según señala la Guardia Civil, en las pintadas se podían observar los denominados «tag» que es la firma estilizada o seudónimo del escritor del grafiti, indicio que permitió identificar a varios de los autores.

Por todo ello, la operación se ha saldado con la detención de dos jóvenes de 18 y 19 años de edad y la investigación de un menor de 17 años. Todos ellos de nacionalidad española. Se les atribuye la comisión 16 delitos de daños por valor de más de 33.000 euros. Aunque la operación se mantiene abierta y no se descartan más detenciones, ya que el principal grupo se encuentra formado por una docena de integrantes.

La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil de Massamagrell con la colaboración de un vigilante de seguridad privada especialista en grafitis como perito calígrafo judicial. Las diligencias fueron entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Massamagrell.